Dos soldados de la Guardia Nacional de Estados Unidos murieron este miércoles tras ser baleados cerca de la Casa Blanca en el centro de Washington. Inicialmente, se informó que los dos miembros de la Guardia Nacional habían resultado heridos de bala y se encontraban internados en grave estado. Sin embargo, más tarde el miércoles, se confirmó que fallecieron los dos soldados.
El tiroteo ocurrió en el centro de Washington, cerca de la Casa Blanca. La Policía Metropolitana de la ciudad de Washington aseguró en la plataforma X (antes Twitter) que la escena estaba asegurada y que un sospechoso se encontraba bajo custodia. Las autoridades aconsejaron a las personas evitar el área.
Reacción presidencial y contexto
El presidente Donald Trump fue informado sobre la “trágica situación”, según la secretaria de prensa Karoline Leavitt. Al momento del tiroteo, el presidente Trump no se encontraba en la Casa Blanca, sino en su campo de golf en West Palm Beach, Florida.
El presidente Trump reaccionó con una declaración enérgica, advirtiendo que el sujeto que disparó a los guardias pagaría un precio severo. El mandatario aseguró que: “El animal que disparó a los dos guardias nacionales, ambos gravemente heridos y ahora en hospitales separados, también está gravemente herido, pero, a pesar de todo, pagará un precio muy alto”.
La Casa Blanca está “al tanto y monitoreando activamente esta trágica situación,” indicó Leavitt.
Movilización de emergencia
Las circunstancias exactas del tiroteo no están claras de inmediato. Tras los informes, las calles de la zona fueron bloqueadas. Vehículos de emergencia, patrulleros y un helicóptero fueron vistos circulando por la zona. Personal de emergencia y la Guardia Nacional se reunieron en una zona acordonada cerca de donde los soldados fueron baleados. Al menos un helicóptero aterrizó en el National Mall como parte de la respuesta de emergencia.
Cabe señalar que elementos de la Guardia Nacional de varios estados estuvieron en Washington durante meses. Su presencia forma parte de la ofensiva contra el crimen del presidente Donald Trump en la capital del país, una ofensiva que desde entonces se expandió a otras ciudades en todo el país.






























