Aunque las encuestas anunciaban que Lula da Silva iba a resultar ganador por amplia mayoría este domingo en las elecciones en Brasil, finalmente el candidato del PT y expresidente del país vecino solo superó a Jair Bolsonaro por cinco puntos, por lo que deberán ir a una segunda vuelta.
En el balotaje, Da Silva y Jair Bolsonaro deberán repartirse los votos del resto de los candidatos, que se ubicaron muy lejos de los dos principales: Simone Tebet, del Movimiento Democrático Brasileño, que apenas superó el 4,18%, y Ciro Gomes, del Partido Democrático Laborista, con el 3,05%.
Los otros siete no logran pasar el 1%. Y quedan los votos en blanco, nulos y de quienes no asistieron.
El balotaje será el 30 de octubre. Ese día, Da Silva y Bolsonaro deberán resolver quién es el ganador de la contienda.
Cómo funciona el balotaje en Brasil
En Brasil, el balotaje se aplica si el ganador no alcanza la mayoría absoluta de los votos, es decir, si no supera el 50%.
En Argentina, para ganar una elección, un candidato necesita ganar con el 45% de los votos o, por lo menos, el 40% de los votos y una diferencia porcentual mayor a 10 puntos con respecto a la fórmula que le sigue.
Voto electrónico
Las elecciones en Brasil se hacen a través del voto electrónico. Quienes votan deben introducir el número del candidato elegido en un dispositivo o máquina. El sistema rige en el país desde 1996.
En esas máquinas, hay un teclado numérico para que el votante presione un código de dos cifras que corresponde a su candidato, cuya foto aparece en la pantalla. Para finalizar, debe presionar un botón verde para confirmar su selección.
Las urnas electrónica no están conectadas a internet. De modo excepcional, en regiones alejadas, se permite usar una conexión satelital.
