El Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes de Estados Unidos citó ayer al Departamento de Justicia para acceder a archivos relacionados con el caso de tráfico sexual de Jeffrey Epstein. La medida incluye además una solicitud de declaraciones bajo juramento al expresidente Bill Clinton, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton y ocho ex altos funcionarios del sistema judicial, en un intento por esclarecer posibles vínculos institucionales con el caso, que mantiene su resonancia pública cinco años después de la muerte de Epstein.
El comité, actualmente bajo control republicano, justificó la decisión en la necesidad de supervisar la aplicación federal de las leyes contra el tráfico sexual, así como el manejo de la investigación y el posterior enjuiciamiento tanto de Epstein como de su excompañera Ghislaine Maxwell.
El presidente del Comité, James Comer, dirigió cartas a la fiscal general Pam Bondi y a exfuncionarios, subrayando el “inmenso interés público” que aún despierta el caso. En su misiva, Comer señala que “es imperativo que el Congreso garantice transparencia total, especialmente cuando las víctimas siguen esperando justicia”.
Pasado y presente
Epstein, un influyente financista con una vasta red de relaciones entre figuras del poder político, económico y cultural, murió en una cárcel federal de Nueva York en 2019 mientras aguardaba el juicio por cargos de tráfico sexual de menores. Desde entonces, las especulaciones sobre qué sabían otros y si hubo encubrimientos han alimentado teorías conspirativas, muchas de ellas impulsadas desde sectores conservadores.
Entre los nombres que más atención generan se encuentra el de Bill Clinton, quien mantuvo una relación pública con Epstein antes de que se conocieran los delitos. Si bien el expresidente viajó en varias ocasiones en el avión privado de Epstein, negó haber visitado sus propiedades o tener conocimiento alguno sobre sus delitos. Hasta la fecha, ninguna víctima lo acusó de conducta indebida.
En paralelo, Trump -quien también conoció a Epstein- intenta de todas las maneras posibles distanciarse del caso, afirmando que rompió toda relación con él “hace mucho tiempo” y que no tenía conocimiento de su conducta criminal. No obstante, la falta de un informe completo por parte del Departamento de Justicia sigue generando tensiones en el ámbito político.
Citaciones sin precedentes
Además de los Clinton, el comité exige declaraciones de seis exfiscales generales: Merrick Garland, William Barr, Jeff Sessions, Loretta Lynch, Eric Holder y Alberto Gonzales, así como de los exdirectores del FBI James Comey y Robert Mueller. Las comparecencias están programadas para el mes en curso, septiembre y octubre, concluyendo con Hillary Clinton el 9 de octubre y Bill Clinton el 14.
Aunque hay antecedentes de expresidentes testificando voluntariamente ante el Congreso, ninguno ha sido obligado a hacerlo por citación. En 2022, el propio Donald Trump apeló a ese precedente legal para resistirse a una citación del comité que investigaba el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021.