El cardenal Ángel Sixto Rossi, arzobispo de Córdoba, llegó a Roma en un momento trascendental para la Iglesia Católica, en medio de los funerales para despedir a su amigo Jorge Bergoglio, el papa Francisco. Días atrás celebró una multitudinaria misa en la Catedral cordobesa en honor al sumo pontífice argentino.
Rossi será uno de los cuatro cardenales argentinos que participará del cónclave, que comenzará el 6 de mayo para elegir al sucesor de Francisco.
La llegada del cardenal Rossi a Roma demuestra la profunda significancia del actual pontífice para la iglesia y su cercanía con Jorge Bergoglio, con quien compartió varios años en su carrera sacerdotal.
En diálogo con Mitre Córdoba, anticipó la emoción que lo embarga al ingresar a Santa Marta, lugar donde se alojaba el Papa, ya que viene a despedir a un “amigo”.
Qué dijo Rossi al llegar a Roma
El propio cardenal Rossi confirmó el fuerte vínculo que lo une a Francisco, describiéndolo como “un padre y un amigo, nuestro formador”.
Además, reveló que ambos vivieron bajo el mismo techo durante diez años en Córdoba, desde su época como jesuita, lo que subraya la profundidad de su relación personal y espiritual.
“Este hombre no es un líder solo nuestro. Hacia allá vamos, y disponer el corazón para que a partir del 6 en el cónclave elegir a quién lo suceda, ojalá que alguien se anime, no a ser igual, pero a tomar la posta y seguir la huella que él nos dejó. En eso estamos”, recalcó.