En la previa de la Navidad, en el programa Mi primo es así se realizó un pesebre viviente en clave de humor que generó controversia porque muchos no lo encontraron divertido, sino que lo consideraron una falta de respeto al cristianismo.
En el sketch, los conductores del ciclo se vistieron como personajes bíblicos y parodiaron el nacimiento del Niño Jesús, realizando comentarios irónicos que desataron todo tipo de críticas en las redes sociales, especialmente en X (antes Twitter).
Entre los animales que se podían ver conformando el pesebre estaba Gatúbela, la antiheroína de Batman de DC Comics. Además, en un momento, Toto Kizner, que hacía de Jesús, vistiendo apenas una especie de pañal de tela, salió de debajo del vestido de Evelyn Botto, disfrazada de la Virgen María, simulando un parto.
En redes sociales, la reacción fue contundente. Se pudieron leer comentarios repudiando la situación, como por ejemplo: “Una burla al cristianismo”, “Vergüenza ajena total” y “Si fuese otra religión, estarían denunciados”.
Guillermo Romero, un libertario en cuyo perfil de redes se lee una afinidad con el gobierno de Javier Milei, se hizo eco de la situación. En una extensa publicación en X aseguró que lo sucedido en Olga atenta directamente contra la Constitución Nacional e incitan al odio hacia la religión católica.
“No vamos a permitir que esto quede impune. Por este motivo, en los próximos días enviaré una carta documento a Olga para avanzar en la defensa de quienes profesamos la fe católica. No vamos a tolerar que degenerados progresistas y ‘quemados mentales’ ofendan a quienes buscamos una nación libre y con valores de familia”, expresó Romero, quien además aseguró que los hechos buscan destruir los valores que defienden las “personas de bien”.
En respuesta a Romero, muchos destacaron que su reacción es exagerada y que, en todo caso, siguiendo su línea de pensamiento político, los panelistas de Olga serían “individuos actuando como agentes libres supliendo una demanda”. Otros, le recordaron que no debe confundir moral con derecho.
Por otro lado, muchos interpretaron la puesta en escena como una estrategia deliberada para generar repercusión mediática. Lo cierto es que, hasta el momento de publicada esta nota, no hubo pronunciamientos oficiales por parte del programa.
Acostumbrados a las críticas
Esta no es la primera vez que el programa y en particular Kizner se encuentran en el ojo de la polémica. Hace unos meses, se generó un mal momento cuando en el ciclo quisieron hacer humor con dichos de Pepe Cibrián.
Como era de esperarse, al dramaturgo no le cayó nada bien lo sucedido y, furioso, despotricó contra todos los integrantes de Mi primo es así. La situación escaló tanto que Cibrián tomó acciones legales en contra de Olga y, como respuesta, Kizner y sus compañeros salieron a pedir disculpas.
