La locutora nacional Marita Monteleone está atravesando un momento complicado, inmersa en una guerra judicial con su única hija, la periodista de Neura, Malena de los Ríos.
Monteleone fue una figura reconocida, siendo la voz oficial de la telefonía en Argentina durante décadas (incluyendo Entel y Telefónica), además de ser una locutora histórica de Radio El Mundo y Radio La Red.
La locutora de 68 años está internada desde hace tres meses en el Sanatorio Centro Gallego de Buenos Aires. Su internación se debe a un proceso de rehabilitación tras una intervención por una artrosis en su rodilla derecha, cubierto por PAMI.
El impedimento para volver a casa
Aunque la locutora afirma que ya recibió el alta motriz de su kinesióloga y de su médica de cabecera. el problema radica en que no puede abandonar el hospital sin una orden judicial.
Marita Monteleone denunció públicamente que su hija habló con el juez para que la trasladen a una residencia para personas mayores. “No sé por qué quiere llevarme a un geriátrico”, advirtió en diálogo con el productor Nahuel Saa de A la tarde, asegurando que está en pleno uso de sus facultades mentales.
La locutora aseguró que De los Ríos solo iba a visitarla para conseguir su firma y así la autorice a manejar sus inmuebles. “Aprovechó el momento, habló con el juez y estoy restringida. Me está perjudicando”, señaló.
“Para mí es un puñal. La única hija que tengo no me quiere ver. Hace más de un año que no la veo. Yo sé que ella está sufriendo más que yo. De acá no me muevo hasta que lo diga el juez porque no quiero que me busque la policía ni me internen en un psiquiátrico”, agregó.
La versión de Malena de los Ríos
En un móvil del programa, el cronista Oliver Quiroz añadió que la locutora dice estar en condiciones para el alta y que se quiere ir a su casa.
Tras sus declaraciones, Malena se comunicó con el periodista Luis Bremer y aseguró: “Marita está diagnosticada con paranoia y es una paciente institucionalizada”.
La comunicadora de Neura sostiene que la decisión de institucionalizar a su madre no fue tomada por ella, sino que fue una disposición de la Justicia.
“Yo no la interné, yo no tomé ninguna decisión. Acá se puso una denuncia policial y dio oficio y con la intervención de un juez se la institucionalizó”, añadió De los Ríos.
