Esteban Lamothe habló públicamente tras las quejas de los vecinos del barrio porteño de Núñez por las complicaciones generadas durante el rodaje de la tercera temporada de Envidiosa.
La exitosa serie de Netflix, que ya se convirtió en un fenómeno con sus primeras dos entregas, se encuentra filmando nuevas escenas en locaciones reales, lo que despertó el malestar de los residentes de la zona.
Las quejas comenzaron a viralizarse en redes sociales y medios por la presencia de motorhomes, cortes de calles y ruidos en horarios poco habituales. Ante esta situación, el equipo de LAM consultó directamente al actor, quien respondió con cordialmente y con humor.
“Pido disculpas a la gente. Probablemente para cualquier persona, que te pongan unos cuantos motorhomes en la vereda y todo ese movimiento, si no estás acostumbrado, es invasivo”, expresó Lamothe.
El actor también explicó la importancia de grabar en escenarios reales para lograr escenas más cercanas al público. “Se necesita para que las cosas se vean reales y las locaciones sean lindas y vos veas una escena en una esquina por la que pasas caminando, como en El Eternauta o mismo Envidiosa, que mucha gente va al bar donde estaba Vicky”, agregó.
Finalmente, Lamothe buscó enviar un mensaje conciliador a los vecinos: “Hay cosas que ya no se pueden evitar y no queda mucho rodaje. Que aguanten y después les vamos a regalar unos domingos de maratón de Envidiosa, estamos trabajando para eso”.
Mientras tanto, los reclamos de los vecinos siguen en aumento. Una residente relató: “El tema es que a nosotros no nos notifican y el jueves, por ejemplo, vinieron como diez personas, pusieron unos conos e impidieron el estacionamiento de autos porque al día siguiente iban a filmar. Soy psicóloga y al otro día pusieron un generador y al lado un camión con alimentos, desde las 8 hasta las 17”.
Otro vecino coincidió con la queja y señaló: “Ya de por sí es un problema estacionar en la zona, y que incluso utilicen el espacio público y dejen gente controlando para que nadie estacione, es un problema para mí que vivo en esta cuadra”.
El malestar se repite en otros relatos. “Cortan tres cuadras y no podíamos dejar el auto porque iba a haber una filmación en el colegio, a las 5 de la mañana comenzaron a poner música de cumbia y a descargar los camiones, sin importarles nuestro descanso. Fueron 24 horas con la cuadra sitiada”, aseguró otro habitante.