Tras unos meses de preocupación por su salud, que incluyeron la pérdida de un embarazo que la afectó profundamente, María Becerra retomó su actividad y en las últimas horas lanzó Infinitos con el mar, su nueva canción presentada bajo su alter ego, Shanina.
Por otro lado, “La nena de Argentina” también anunció un nuevo show en el estadio de River Plate, previsto para diciembre de este año.
En ese contexto de promoción, María visitó Perros de la calle, el programa de Andy Kusnetzoff en Urbana Play. Allí habló tanto de su presente artístico como de su situación personal.
El ciclo radial cuenta con una intervención semanal de Gabriel Rolón, con quien mantuvo una conversación profunda sobre las secuelas emocionales que le dejó el difícil momento que atravesó.
“¿Cuándo sentiste que tuviste que crecer de golpe?“, preguntó Kusnetzoff. La joven respondió, en primer lugar, que esa sensación surgió cuando su carrera despegó, al finalizar la pandemia.
Sin embargo, luego añadió que a fines de 2024 y mediados de 2025, su situación personal volvió a enfrentarla a un crecimiento abrupto.
El diálogo de Gabriel Rolón y María Becerra
El licenciado intervino y comentó sobre las primeras palabras de María. Es que Becerra añadió en su testimonio que tras su traumática situación no fue a terapia.
“Después de todo lo que me pasó no hice terapia. Me da mucha cosa llorar, contar mis cosas y pedir ayuda porque no me gusta molestar a los demás. Tuve mucho miedo de morirme y lo sigo teniendo. 4 Cuando te estás muriendo es tremendo la cantidad de cosas que se te pasan por la mente. Cuando lográs salir de eso, ves la vida completamente diferente. Todo lo empecé a ver distinto y siento que me empecé a tomar con más calma la vida en general”, expresó.
Entonces, Rolón comentó: “Hay que poner en palabras lo que uno siente para sacarlo de adentro”. Y luego añadió su enfoque crítico y reflexivo: “No te claves puñales en vano”, le dijo.
“Cuando a vos te pasa algo malo, rápidamente nuestra mente se pone en movimiento para ver cómo lo podríamos haber evitado. Uno lo que quiere es cambiar la historia, o mejor dicho, quiere cambiar el pasado. Y el pasado no se puede cambiar, pero la historia sí. Porque la historia es la apropiación que vos hacés de tu pasado“, continuó.
Para cerrar un diálogo lleno de emotividad, llanto y reflexiones, Rolón expresó: “Siempre es saludable, para cualquier persona en el mundo, pero sobre todo para un artista, sentir que ha estado muy bien, que ha dado algo maravilloso, pero que hay todavía un resto por el cual vale la pena seguir creando”.