En julio se casarán Oriana Sabatini y Paulo Dybala. Si bien ellos viven en Europa, decidieron que la gran ceremonia sea en la Argentina para que puedan asistir la mayoría de sus amigos y familiares. Obviamente que la novia está a full preparando cada detalle con la ayuda de Plan V, la empresa de Claudia Villafañe que está a cargo de la organización.
La pareja decidió que todo fuera sorpresa pero Cathy Fulop siempre mete la pata y termina contando un poco más de la cuenta. Justamente esta semana estuvo invitada a Cortá por Lozano (Telefe) y compartió los dos aspectos de la boda que más le han molestado.
“Ellos no quieren video en la boda. No van a poner las fotos de la familia o de cuando eran pequeños. Le he pedido a Claudia una pantalla porque quería hacerlo igual pero ella me ha dicho que no, que los chicos no quieren”, agregó entre divertida y molesta.
Otra de las exigencias impuestas por Oriana y Paulo es el hecho de que los invitados no lleven celular. Esto era algo que se había filtrado con anterioridad pero en esta ocasión, Cathy explicó el motivo. “Lo he entendido porque uno sino está pendiente de ‘quiero retratar esto o lo otro’ y pierdo cosas. Es mejor porque uno se relaja y disfruta del momento, del presente. Total hay alguien contratado para eso”.
Cathy sumó otro detalle más: “En la invitación de casamiento pusieron que todos los momentos van a quedar retratados y que los tendrán sus invitados también, porque van a compartirlo. Es hermoso”.
El fiestón que se viene
El día tan esperado será el próximo 20 de julio y contará con más de 300 invitados. La novia eligió para ese momento un diseño de Dolce & Gabbana y según lo poco que se fue filtrando, la boda tendrá todos los condimentos de las ceremonias tradicionales pues Oriana es para eso ‘muy chapada a la antigua’.
En cuanto a la luna de miel, Oriana dijo que ‘les daba fiaca’ organizarla y que no tenían muy en claro a dónde les gustaría ir pero que seguramente debería ajustarse a los tiempos del jugador y sus compromisos.
