Ángeles Balbiani, en Puro Show, contó algunos detalles del detrás de escena en la conflictiva relación entre Benjamín Vicuña y La China Suárez.
“Muchos trascendidos que tienen que ver con que Vicuña iba a poner una cautelar, o que iba a pedir restitución internacional de sus hijos. Durante esta última semana empezó a correr mucho ese rumor”, comenzó diciendo la panelista.
“A las fuentes me remití y empecé a averiguar en qué relación estaban La China y Benjamín. Benjamín hoy está en Uruguay con sus hijos y con los hijos de la China. Pero, ¿qué pasó? ¿Ustedes recuerdan que el permiso de menor que ambos tenían fue revocado en su momento para hacer permisos individuales por cada viaje que iban a hacer? Benjamín se encontró con la situación de que él no tenía permiso para viajar con los menores porque, cuando vos revocas un permiso, el permiso está revocado para los dos", contó.
“Bueno... hablan los abogados de ambos y La China accede a darle el permiso para que pueda viajar a Uruguay. Entonces eso empieza a marcar entre ellos una mejor relación. La China y Benjamín no se hablan, pero sí empezaron a dialogar los abogados”, siguió.
“¿Qué es lo que está buscando el abogado de la China y el abogado de Benjamín? El abogado de la China particularmente está buscando modificar el arreglo que tienen hasta el momento. El arreglo que tienen hasta el momento es más o menos promediando tres semanas con la China, una semana con Benjamín y tres semanas con La China... Él cedería que los chicos pasen más tiempo en Turquía. Está en negociación. No te sé decir exactamente qué es lo que van a hacer... Lo que están evitando es que lo decida un juez", contó.
“Uno de los rumores que se corría era que la China quería llevarse a los chicos y a cambio de eso Benjamín tenía que dejar de pagar la cuota alimentaria y que Cabré también iba a dejar de pagar la cuota alimentaria. No es cierto. Ambos ambos siguen pagando la cuota alimentaria de los chicos como corresponde”, explicó.
“¿Sabes lo que no se imaginó? Que Cabré iba a acceder a que Rufina viajara. Pensó que iba a ser una batalla en conjunto. Esa era una carta que yo creo que nunca se lo imaginó. Lo que pasa es que Rufina es un poquito más grande que los otros chicos, entonces ya puede expresar lo que siente y lo que quiere. Y la nena le dijo, ‘Yo quiero estar con mi mamá, yo quiero ir allá’. Si la nena en algún momento manifestara que no está cómoda o que no se siente bien en ese lugar, bueno, ahí se revertiría la situación. Pero es distinto cuando ya el chico ya puede opinar", analizó luego.
