El juicio por la muerte de Diego Armando Maradona vivió este martes uno de sus momentos más críticos. En los pasillos de los Tribunales de San Isidro, donde se desarrolla el proceso judicial, Gianinna Maradona, hija del astro y querellante en la causa, sufrió una descompensación emocional que obligó a su inmediata asistencia.
La jornada ya venía marcada por un fuerte escándalo institucional. La jueza Julieta Makintach fue denunciada por haber permitido la grabación de un supuesto documental sobre la causa sin el consentimiento de las partes, lo que podría derivar en la nulidad de todo lo actuado hasta el momento. La noticia impactó de lleno en la familia Maradona, especialmente en Gianinna, quien desde el inicio del proceso ha tenido un rol activo.
A su llegada al edificio judicial, visiblemente angustiada, Gianinna fue abordada por la prensa. Con la voz quebrada, respondió escuetamente.
“Estoy muy triste, y estoy muy triste con que se hable tanto”, repitió ante los micrófonos. Cuando le consultaron sobre sus expectativas en el juicio, fue contundente: “Yo quiero que se sepa la verdad lo más rápido posible”.
La tensión escaló aún más cuando intentó avanzar entre medios y camarógrafos. “¿Me dejan caminar, porfa? Es horrible que estén así. Es re triste estar así”, expresó mientras intentaba abrirse paso.
El pedido se tornó en súplica: “Chicos, ¿me dejan pasar? Por favor, me va a agarrar un ataque de pánico”.
Poco después, Gianinna colapsó emocionalmente. Las cámaras de Telefe captaron el momento en que, entre lágrimas y con dificultades para respirar, se desplomó sobre uno de los asientos del hall del edificio, mientras era asistida por su entorno.
El periodista Mauro Szeta, desde la pantalla de América, relató la escena: “Está descompensada, o al menos en un estado de conmoción. Se la ve quebrada, como si le faltara el aire”, detalló.