El popular creador de contenido digital Bruno Kruszyn, conocido como Brunenger, compartió los detalles del accidente automovilístico que sufrió el pasado 21 de septiembre, durante la celebración de su cumpleaños, y la larga serie de consecuencias médicas que lo mantuvieron hospitalizado por más de un mes.
El streamer relató en su canal de YouTube que la camioneta en la que viajaba volcó, dejándolo con la cabeza abierta, el hombro severamente dañado y una posterior cadena de complejas cirugías y reingresos a terapia intensiva.
El relato del accidente comienza luego de una fiesta de cumpleaños, cuando el streamer se dirigía a otro local nocturno, siendo recogido por su hermano ya que él había consumido alcohol. Brunenger relata que se sentó atrás y se durmió. “Literalmente me dormí en Museum y directamente ya me desperté con el auto volcado” afirmó el protagonista.
Al volcar la camioneta, el único cristal que explotó fue el del techo, y este punto de contacto expuso la cabina al asfalto. Brunenger no recuerda el impacto, solo despertar y sentir que todo su cuerpo se había raspado.
Secuelas visibles: hueso y 16 puntos
Cuando despertó, sus amigos que habían salido del vehículo le indicaban que permaneciera acostado. El hombro fue una de las zonas más afectadas, al punto que Valen, una de sus acompañantes, le vio el hueso expuesto al correrle la remera.
El streamer relató que fue trasladado a un shockroom donde procedieron a limpiar sus heridas, que estaban llenas de “vidrios” y “cosas de la calle”. Solo en la cabeza, donde la herida era “muy abierta”, recibió aproximadamente 16 puntos de sutura.
Complicaciones y operaciones requeridas
El hombro requirió un tratamiento especializado. Después de una limpieza inicial y la colocación de una bomba de drenaje, los médicos decidieron realizar un injerto de piel. Para este procedimiento, se le extrajo un fragmento grande de piel de la espalda para colocarlo en el hombro.
La recuperación se vio gravemente comprometida por una bacteria intrahospitalaria, la cual hizo que el injerto supurara y que los puntos se abrieran. Debido a esta infección, Brunenger tuvo que reingresar al quirófano para en múltiples ocasiones, sumando ya cinco intervenciones entre el hombro y la cabeza.
Para combatir la infección que le provocaba “volar de fiebre” y la apertura de las heridas, fue necesario colocarle un catéter central. Este catéter permitió la administración de antibióticos intravenosos ya que las vías normales estaban agotadas por la cantidad de pinchazos recibidos.
Trombosis e infarto pulmonar
Luego de superar un mes de internación y al recibir el alta el 25 de octubre, el streamer regresó a su casa. Sin embargo, al día siguiente, la fiebre y un dolor intenso en el brazo reaparecieron, lo que lo obligó a volver a la guardia.
Tras una ecografía especializada (ecodopler), se confirmó que había desarrollado un trombo (trombosis) en el brazo, una complicación provocada por el catéter central. Esta situación fue catalogada como “muy peligrosa” debido a la cercanía de la vena afectada con el corazón.
Durante su segunda internación, y mientras era tratado con anticoagulantes, Brunenger sufrió un dolor súbito y agudo en el pecho, que describió como “puntazos” que le impedían respirar. Finalmente, una resonancia con contraste reveló que estaba sufriendo un infarto pulmonar (un trombo en el pulmón), lo que requirió su traslado a la Terapia Intensiva Cardiovascular.
El streamer detalló que, para curar la trombosis, los antibióticos le causaban severos problemas estomacales, lo que ilustra la cadena de complicaciones que enfrentó durante su recuperación.
