El reciente estreno del documental de Duki en Netflix reavivó viejas tensiones y un escándalo entre el trap y el periodismo del espectáculo.
Rockstar: DUKI desde el fin del mundo repasa la carrera de Mauro Lombardo (Duki) desde sus inicios en El Quinto Escalón hasta su consagración internacional. En el documental, el artista defiende su género musical y arremete contra quienes lo cuestionan, señalando directamente a figuras como Susana Roccasalvo y Daniel Gómez Rinaldi.
El documental pone en evidencia los prejuicios y las resistencias que el trap enfrentó en sus primeros años, intercalando imágenes de archivo con testimonios actuales.
En este contexto, Duki aborda la mirada despectiva que sintió por parte de ciertos sectores del espectáculo.
En uno de los pasajes más contundentes del documental, Duki reflexiona sobre el éxito de su generación frente a la incredulidad de los críticos. El músico sintetizó la situación en una sola frase: “Nos subestiman porque dicen: ¿cómo hicieron estos pibitos para llegar a ciertos lugares en la mitad del tiempo que nosotros?”.
“Porque somos guachines no nos quieren reconocer. Tranquilos, las generaciones que vienen nos van a dar nuestras flores. Pero la cosa es así, nosotros somos de las mejores mentalidades que han tenido los géneros. Somos gente unida, no bardeamos a nadie, nos queremos entre todos, nos cuidamos y tratamos de dar el mejor mensaje siempre. Entonces, que nos den media mano derecha”, dice.
El contrapunto periodístico
El documental expone el desprecio inicial con el que muchos sectores miraron el surgimiento del trap. La escena refleja a periodistas como Roccasalvo y Gómez Rinaldi ironizando sobre el fenómeno. Un periodista, con sorpresa, destaca el alcance de Duki: “Tiene 200 millones de reproducciones en Spotify, es muy groso el Duki”, a lo que Roccasalvo respondió, con ironía: “Sí, sí, muy groso”.
Tras el estreno del documental, ambos periodistas salieron a responder a las declaraciones del músico.
Daniel Gómez Rinaldi confirmó en LAM que fue contactado por Netflix para autorizar el uso de sus imágenes: “Tuve que firmar el consentimiento”.
Rinaldi recordó un enfrentamiento previo con el artista: “Estaban los colegas para hacerle una nota y él pasó corriendo. Entonces yo le dije de todo, que nunca iba a ser Palito Ortega, Sandro. Lo mandé al diablo. Pero la verdad es que ni lo conocía, no sabía lo que hacía”.
A pesar de los años y del éxito internacional de Duki, Gómez Rinaldi se mantuvo firme en su postura: “No me arrepiento de lo que dije. Le deseo lo mejor, pero no lo consumo. Yo llevo cuarenta años en esto y creo que el trap no sé si va a ser eterno como lo fueron Luis Miguel, el rock o Sandro. Vamos a ver con el tiempo”.
Susana Roccasalvo también fue consultada y se mostró sorprendida al enterarse de su aparición en el documental: “Me estoy enterando por vos”.
La periodista relató que había firmado un consentimiento hace cerca de un año, pero no sabía para qué proyecto era.
Al ver el fragmento, Roccasalvo le restó importancia a su comentario original: “Esto fue hace tres años. Ni se conocía. Está bien. Un honor, un tipo que está ganando millones de dólares”.
Sobre el talento del músico, la periodista fue sincera: “Nunca lo escuché. Cantan todos igual. Pero si gana millones, está perfecto”.