La reciente muerte de Liam Payne, el exintegrante de One Direction, no solo dejó un profundo vacío en el mundo de la música, sino que también hizo resurgir algunos momentos incómodos de su vida, incluidos antiguos relatos que ahora adquieren una nueva dimensión, como es la anécdota de cuando conoció al rapero Sean “Diddy” Combs. Diddy se enfrenta actualmente a graves denuncias de abuso, involucrando a más de 120 personas, entre ellas un niño de 9 años.
El momento cobró relevancia tras su viralización por parte los fans del cantante británico. Payne, quien falleció trágicamente el 16 de octubre tras caer del tercer piso de un hotel en Buenos Aires, relató en 2017 cómo una interacción con el rapero lo dejó profundamente incómodo.
Durante una charla con la emisora KIIS FM, Payne habló sobre una fiesta repleta de celebridades en la que compartió un extraño momento con Diddy. “Me acerqué a hablar con él y con Jay-Z, y cuando le estreché la mano, sonrió de una forma que me pareció malvada. Fue la risa más siniestra que he escuchado”, dijo, dejando claro el impacto negativo que le generó esa interacción.
El cantante admitió haber tenido una percepción distinta del entonces magnate del hip hop, pero después del encuentro, sintió que “se equivocó” al pensar que sería fácil relacionarse con él. En palabras de Payne, fue una de las experiencias más desalentadoras que había tenido con una celebridad.
Tiempo después, Liam volvió a referirse al tema en el programa de Graham Norton, donde añadió más detalles sobre su incomodidad. Payne explicó que había intentado interactuar con Diddy mientras este hablaba con figuras como Jay-Z y Leonardo DiCaprio, pero la experiencia fue extraña desde el principio. “Pensé que sería fácil hablar con él en ese escenario”, confesó. Sin embargo, lo que más lo perturbó fue el apretón de manos: “Fue el apretón más largo de mi vida. Me quedé mirando a Diddy, preguntándome cuándo acabaría”.
