El 22 de mayo se anunció en el Boletín Oficial el decreto 345/2025, que postula cambios en históricos organismos culturales de la Nación. El Instituto Nacional del Teatro es uno de los más afectados, ya que se amenaza su autarquía e independencia.
Hoy, 4 de junio, será último día hábil para tratar el decreto en el Congreso y declarar su rechazo o aprobación. Por tal motivo la Mesa Provincial de Teatro de Córdoba invitó a marchar junto a los jubilados en la Plaza San Martín para extender su reclamo.
La convocatoria propuso finalizar la movilización en la Radio Nacional, donde funciona el Instituto Nacional del Teatro en Córdoba.
Las manifestaciones en contra del decreto durante los últimos 10 días fueron contundentes y extendidas en todo el país. En el caso cordobés, distintas organizaciones teatrales realizaron campañas en redes sociales, y el domingo se realizó un “abrazo virtual” al INT.
Además, la Mesa Provincial de Trabajo de Córdoba tuvo una representante frente a la Comisión Bicameral del Congreso de la Nación Argentina para defender la Ley 24.800 hace una semana.
Garba, actriz e integrante del colectivo “Itinerantes”, afirmó: “No elegimos ser lo que somos, sino defender lo que somos. Elegimos luchar por ese lugar en la historia”. Hizo referencia a la gestión transparente de los fondos del INT y destacó que las asignaciones nunca cubren los costos totales de las actividades, sino que son fomentos.
“Las políticas públicas vinieron a ampararnos contra la idea romántica de que somos unos subvencionados y subvencionadas”, subrayó.
En Buenos Aires, en la sede central del INT, se realizó un abrazo simbólico en defensa del instituto el domingo 1 de junio. La movilización terminó con la activación del protocolo antipiquetes y represión policial.
En ese marco, Gonzalo Pérez, presidente de la Asociación Argentina del Teatro Independiente (Artei), expresó: “Este abrazo al INT es el inicio de la pelea”.
El decreto y las transformaciones
De acuerdo al decreto 345/2025, “no es posible garantizar la adecuada gestión de los fondos, afectando el cumplimiento de las políticas públicas en la materia”. Así, justifica la aplicación de “medidas correctivas” hacia el INT.
La principal alarma es la amenaza a la autarquía funcional del Instituto creado en 1997. El texto asegura que “no es un requisito indispensable para el cumplimiento de sus objetivos institucionales y, además, se evidenció una gestión deficiente en la administración”.
Así, el INT se transformaría en una unidad organizativa de la Secretaría de Cultura de la Presidencia de la Nación. Esto implica que su Consejo de Dirección se reemplace por un “Consejo Asesor ad honorem” con un representante de cada región cultural.
“Este decreto es inconstitucional porque implica la desaparición del Instituto como tal y porque un decreto no puede derogar una ley sin el permiso del Congreso”, denunció Garba en diálogo con La Tinta.
En caso de aprobarse, el INT quedaría despojado de su autonomía para administrar equitativamente sus fondos, y la representación federal perdería fuerza en la estructura del nuevo Consejo Asesor.
El antecedente de esta situación es la propuesta esbozada en el proyecto de Ley Ómnibus sobre la derogación de la Ley Nacional del Teatro 24.800, amenazó con la disolución del INT en enero de 2024.
Además del INT, el decreto 345/25 afecta a la Comisión Nacional de Biblioteas Populares, y los institutos nacionales Eva Perón, Sanmartiniano, Yrigoyeneano, Juan Manuel de Rosas, incluyendo la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos.
