Los premios Guinness siempre generan revuelo por su naturaleza insólita. Sorprende también como las proezas más extravagantes pueden tener una fiera competencia detrás, apuntando a un título para el que se entrena por toda una vida.
Por ejemplo, el récord Guinness a mayor cantidad de sandías destruidas a cabezazos en la menor cantidad de tiempo (actualmente 40 sandías en 30 segundos).
Ahora, el actor Tom Cruise obtuvo un reconocimiento a su trabajo incansable por encontrar la manera más creativa de poner en riesgo su vida.
Así es el caso de una de sus acrobacias más espectaculares, que se ve en su última película.
Desde este jueves, Tom Cruise tiene actualmente el récord Guinness por la mayor cantidad de saltos de altura con un paracaídas incendiado.
Para la grabación de Misión Imposible: La Sentencia Final, Tom Cruise quiso desafiar la muerte por última vez, luego de su espectacular secuencia de acción donde está agarrado solo con las manos de un biplano a 500 metros de altura.
Luego de una última batalla con el antagonista principal de la película, el agente secreto Ethan Hunt es incapaz de tomar control del avión. Por ello, decide abandonarlo y saltar al vacío con un paracaídas.
En caída libre, el actor de 62 años buscó activar su paracaídas, el cual al desplegarse enciende peligrosamente en llamas.
Ethan, con mente fría, corta el paracaídas prendido fuego y activa el de repuesto, lo que le permite aterrizar fuera de peligro.
Para grabar esta peligrosísima escena de riesgo, Tom Cruise puso en riesgo su vida 16 veces.
“Vamos a hacer esto de manera inteligente. No estoy diciendo que tomemos riesgos. Nosotros no tomamos riesgos… obviamente”, ironizó Cruise en el video.
