La casa del dragón ya es un éxito en la pantalla de Max y con cuatro episodios emitidos se convirtió en la serie principal de la plataforma.
Tras los eventos de los primeros tres capítulos, los “verdes” (el bando de los Hightower) ya han comenzado su despliegue militar, y su estrategia está dando buenos resultados.
Por el lado de Rhaenyra y los “negros”, su intento de negociar una tregua con Alicent retrasó sus movimientos y no les permitió movilizar sus defensas a tiempo. Con el ataque de Ser Criston Cole inminente, el tiempo juega en contra en Rocadragón.
La siguiente nota contiene “spoilers”. Se recomienda regresar luego de ver el capítulo.
La fuerza del poder dominante
Vuelve a la dirección Alan Taylor. A estas alturas, es posible detectar que él es el encargado de los episodios con feroces batallas. La acción y el suspenso se presentan de su mano y parece que, de aquí al final, solo habrá muerte y destrucción.
La coronación (errónea o no) de Aegon Targaryen le otorgó el poder del reino a los Hightower, inicialmente comandados por la Mano del rey, Otto. Sin embargo, como vimos anteriormente, Aegon destierra a su abuelo al no aceptar su consejo, dejándolo en stand by en Altojardín.
Lo que parece ser una reestructuración improvisada del consejo, comienza a dar buenos frutos con la estrategia de la nueva Mano, Ser Criston. Él mismo se encarga de ir a la guerra y comandar los primeros ataques contra la “usurpadora”.
Rhaenyra regresa de su encuentro con Alicent y envía a su tía, Rhaenys, a contraatacar. La batalla de Rook’s Rest deja claras y contundentes consecuencias.
El enlace con Game Of Thrones. En Molino de fuego (capítulo 3) vimos que Bhaena, la hija de Rhaenyra se llevó 3 huevos de dragón a Pentos. Según indicaron en páginas oficiales de la producción, estos son los hijos de Daenerys que nacen 170 años después de la “Danza de dragones”.
Daemon perdido en Harrenhall. El esposo de Rhaenyra sigue con su aventura en el sitio estratégico más deseado de esta guerra. Si bien, todos están al tanto de su presencia allí, Daemon parece perder el tiempo haciendo alianzas (por el momento en vano) y con visiones aterradoras en el castillo embrujado. De hecho, se hace llamar “majestad” y la bruja Alys Rivers le introduce en sus sueños visiones en el trono de hierro. En una, se lo ve a él cortándole la cabeza a Rhaenyra de joven. Mientras lucha contra sus pensamientos, los “verdes” aprovechan que no está presente este gran guerrero para defender el bando de la legítima reina.
Ser Criston Cole, el gran estratega. La flamante Mano del Rey encabeza los ataques de su ejercito y sigue firme en su paso hacia la guerra. En este episodio vemos que gana con contundencia una batalla que lleva a la rendición a la casa Darklyn.
Allí cranea su siguiente paso, con complicidad del príncipe Aemon. Juntos irán a destruir Rook’s Rest, una fortaleza poco poblada para llamar la atención del consejo de Rhaenyra. Saben que podría haber respuesta bélica de su parte.
El aborto de Alicent. El Gran Maestre de Desembarco del rey le lleva a Alicent Hightower una poción de Té de luna, brebaje que utilizaban para el aborto. Ella lo toma y queda descompuesta. Tanto, que no asiste a la reunión del consejo encabezada por el rey Aegon. Larys se da cuenta de esto y la visita en sus aposentos. El espía se da cuenta de lo que sucede y le consulta por las ambiciones que tiene y por las que podría tener su hijo.
A continuación, Aegon discute contra todo su consejo al ser relevado de los movimientos de Cole. Resulta que todos saben los pasos de la guerra, excepto él. Furioso va al encuentro con su madre y queda entendido que este no quiere ser rey.
La batalla de Rook’s Rest. En este capítulo, La casa del dragón nos muestra el poderío del reino. Cole gana sus batallas con firmeza y absorbe ejércitos por distintos sitios de Poniente. Al llegar a Rook’s Rest, la fortaleza está sitiada y, en respuesta de batalla, llega Rhaenys con Meleys a combatirlos. Al principio arrasa contra las tropas pero el plan era atraerla para matarla a ella y su dragón.
Antes de que aparezca Aemon a completar el plan, el rey ebrio Aegon llega y es abatido por la princesa en combate. Este cae en el medio de la nada y es aplastado y quemado por la caída. Lo que vemos en el final es que Aemon finalmente la derrota, pero su hermano yace muerto en el suelo. Ser Criston Cole es el responsable de la caída de su rey.
¿Cómo responderán los Negros?
Los negros cayeron en la trampa de Cole y perdieron a la princesa Rhaenys junto a Meleys. Corlys Velaryon está en el otro lado del mundo y todo parece indicar que romperá relaciones con el bando de su esposa al enterarse de la noticia. En el principio, le aconsejó la retirada a su difunta esposa. Las consecuencias de una guerra sin Corlys será perder el poderío naval.
Mención aparte para el despliegue visual fantástico y las tomas de la guerra que tuvo el episodio. La tensión, la muerte y el suspenso en la batalla fueron los puntos fuertes: fuego y sangre. Exactamente lo que vinimos a ver en la segunda temporada de La casa del dragón.
Estamos recién a la mitad y los episodios que continúan mostrarán a detalle la fascinante historia de la “Danza de dragones”.
