Hace once años, María Noel enfrentó uno de los momentos más difíciles de su vida: el diagnóstico de hepatitis fulminante autoinmune, una enfermedad poco frecuente pero grave que puede poner en riesgo la vida en cuestión de días.
En diciembre de 2014, gracias a una gestión eficiente, en diciembre de 2014, recibió un trasplante de hígado en el Hospital Privado Universitario de Córdoba.
Hoy, más de una década después, regresó al mismo hospital por un motivo completamente diferente: el nacimiento de su hija Jacinta.
Esta historia refleja el valor de la medicina de alta complejidad, la importancia de la donación de órganos y el compromiso del equipo interdisciplinario que conforma el Hospital, dedicado a brindar atención integral y especializada a cada paciente y su familia.
El camino hacia la maternidad
Tras recibir un trasplante, María Noel inició una etapa de controles y cuidados permanentes. Durante años asistió al Hospital Privado para sus revisiones, siempre acompañada por el equipo interdisciplinario que la había acompañado en aquel momento tan importante de su vida.

Once años después, volvió al Hospital, pero esta vez lo hizo con una emoción diferente: la de una mamá que llegaba a dar a luz a su hija.
Para lograrlo, atravesó un tratamiento de fertilidad asistida y un embarazo de seguimiento estricto, guiado por especialistas en Hepatología, Medicina Reproductiva, Ginecología y Obstetricia, quienes trabajaron de manera conjunta para cuidar cada detalle de su salud y la de su bebé.
Gracias a su fortaleza personal y a la dedicación del equipo médico, María Noel pudo transitar un embarazo seguro, con el acompañamiento constante de los profesionales del Hospital.
Finalmente, en julio de 2025 nació Jacinta, símbolo de esperanza, del trabajo comprometido de los especialistas y del amor incondicional de una familia que siempre confió en el camino y en los profesionales.
El trasplante de hígado: una segunda oportunidad para vivir plenamente
Cuando el hígado pierde su capacidad de funcionar de manera irreversible, el trasplante hepático es la única opción terapéutica. Gracias a los avances médicos, este procedimiento permite a miles de pacientes cada año recuperar su calidad de vida.
Incluso, en muchos casos, pueden llevar adelante una vida plenamente activa que incluye la posibilidad de concretar la conformación de una familia.
En casos como la hepatitis fulminante autoinmune, el trasplante hepático se convierte en la única alternativa para sobrevivir. La clave está en la detección temprana y en la disponibilidad de órganos gracias a la donación, que permite ofrecer una segunda oportunidad de vida a los pacientes.
En 2014 aún no existía la Ley Justina, y el caso de María Noel conmovió al país entero. Su familia y amigos impulsaron una campaña nacional que recorrió medios y redes, movilizando a miles de personas.
Finalmente, gracias a la decisión solidaria de una familia donante, en diciembre de ese año María Noel recibió el trasplante que le permitió continuar su camino y mejorar plenamente su calidad de vida.
Conocé el caso de María Noel
La historia de María Noel demuestra cómo la donación de órganos puede salvar vidas y abrir caminos hacia nuevas etapas llenas de esperanza. Cada trasplante no solo ofrece una segunda oportunidad, sino que también posibilita que nuevas generaciones lleguen al mundo.
Este logro fue posible gracias al acompañamiento del Hospital Privado Universitario de Córdoba, institución acreditada por la Joint Commission International (JCI) y siendo Hospital donante, que asume con compromiso su rol en la promoción de la donación y en la atención humana, integral y de excelencia a cada paciente.






















