El hormigón pulido (también llamado alisado) es un recurso muy empleado en pisos de grandes superficies, naves industriales y centros comerciales. Su aspecto moderno y sofisticado, junto con su practicidad, le hicieron ganar protagonismo en las viviendas residenciales en los últimos años. Cabe destacar que no se trata de un revestimiento o capa cementicia, sino de una losa tradicional monolítica de hormigón, que se fragua in situ y tiene un espesor que va de los 6 a los 15 centímetros.
Este hormigón se puede traducir en colores intensos, suaves, pasteles, movidos, mezclados, con brillo o bien satinados. Asimismo, es un piso que se puede encerar, pulir y también plastificar. A efectos de prevenir rajaduras, se suelen trabajar paños pequeños de alrededor de 4 metros cuadrados que se separan con juntas de dilatación, sobre todo si son suelos de exteriores, ya que están más expuestos a cambios de temperatura.
Clave a tener en cuenta: cuanto más reducido sea el paño, mejor será el resultado ante posibles rajaduras. Gracias a su composición y al proceso utilizado para su ejecución, es un piso muy duradero. El material aporta una elevada resistencia, que se complementa en el pulido de la superficie, lo que la hace el doble de robusta que un suelo de cemento sin pulir.
Desde lo estético, permite la combinación con piezas de decoración o guardas de materiales diversos (mármol, cerámica, metal, vidrio, venecita o granito). Sin embargo, los expertos advierten que, al ser un material constructivo en bruto, requiere mayor atención al combinarse con otros elementos decorativos.

“Quizás lo viste en alguna casa moderna, en un local con estilo industrial o incluso en cocinas o baños. Es un tipo de piso que tiene algo especial: combina elegancia, practicidad y resistencia, todo en uno. Se trata del hormigón alisado, un piso continuo, de aspecto liso y moderno. Se realiza con maquinaria especial y lleva un sellado final que lo protege del uso diario. Pero no sólo se ve bien, también es duradero, fácil de limpiar y súper versátil. ¿Por qué cada vez más personas lo eligen? Porque es resistente (soporta golpes, tránsito, humedad y más), minimalista y elegante (va bien con estilos modernos, rústicos o industriales), fácil de mantener (una limpieza básica lo deja como nuevo) y adaptable (se puede aplicar en cocinas, livings, dormitorios, escaleras y hasta en patios”, enumeró Guido Reggio, fundador y responsable de Hormi-Ya, quien hace años decidió apostar fuerte por este rubro y hoy lidera una empresa que busca innovar, mantener la calidad y estar cerca del cliente en cada proyecto.
Asimismo, el hormigón alisado es ideal para pisos con calefacción (también conocidos como pisos radiantes), por su excelente conducción térmica. Además de pisos, la firma trabaja con escaleras, mesadas, galerías y superficies decorativas. “Es una elección inteligente para toda la vida. Para mí, no se trata sólo de vender hormigón. Se trata de entender lo que necesita cada persona, cada familia, cada obra, y brindar un trabajo que dure, que se vea bien y que deje una buena experiencia. En Hormi-Ya hacemos eso: nos comprometemos con cada cliente, como si fuera el primero”, concluyó Reggio.
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