Se acerca septiembre, la primavera asoma en el horizonte y las temperaturas comienzan a ser más agradables. El patio de la casa invita a pasar más tiempo al aire libre, pero, aunque la pileta está ahí, el agua se siente demasiado fría como para darse un chapuzón.
Para estas situaciones, la climatización solar aporta la solución: se trata de un sistema puro, no requiere de mantenimiento, es amigable con el ambiente y permite prolongar la temporada de pileta desde septiembre hasta abril (en la medida en que no haya heladas).
“En el mercado hay una amplia variedad de sistemas de distinta calidad y precios: 1) con colectores de polipropileno (de origen estadounidense), son los de mejor calidad y mayor vida útil. Ejemplo de marcas: Aquasol y Nuvis 2) con colectores de EPDM, tipo caucho. Son nacionales y tienen muy buen rendimiento costo-beneficio. Se recomiendan para techos planos o con poca inclinación 3) con colectores de tubo de vacío.
Son más sofisticados y sólo se pueden instalar en techos planos. Su rendimiento y vida útil son excelentes 4) con mangueras de riego, circulares. Son sistemas que comenzaron siendo caseros, hoy han alcanzado estándares óptimos de funcionamiento. Son más económicos, no hay registros de su vida útil y se pueden instalar sólo en techos planos”, enumeró Carlos de Pérez, de la firma Red Solar.
Todos estos sistemas funcionan correctamente, siempre y cuando estén bien dimensionados en relación al tamaño de la pileta. Se basan en hacer circular el agua de la pileta por los colectores, utilizando la misma bomba de filtración. A través de un controlador digital de temperatura, el sistema se automatiza.
La instalación suele ser sencilla y generalmente se realiza en el día. Se puede decir que una pileta está climatizada cuando el agua llega a tener entre 27°C y 32°C.
“Estos sistemas pueden elevar la temperatura del agua de la pileta en más 12°C o 15°C de la temperatura mínima ambiente. Con piscinas cubiertas se logran mejores resultados, o sea que en Córdoba, a partir de noviembre y hasta fines de marzo, sabemos que podemos tener la pileta climatizada”, planteó de Pérez.
Ahorro y disfrute
Con el aumento de las tarifas de energía y el deseo de extender la temporada de pileta, CheapSun Max se presenta como una solución práctica y sustentable. Este colector solar para piscinas fue diseñado y fabricado en Argentina con el respaldo de CheapSun, empresa líder en dispositivos solares. Está elaborado en caucho EPDM de alta calidad, desarrollado con menos material blanco de relleno que los productos convencionales.
Esa fórmula exclusiva no sólo aumenta la durabilidad del colector, sino que también mejora significativamente la eficiencia calórica y la retención del calor, logrando un mayor rendimiento a lo largo del día.
“Gracias a su composición pura y libre de impurezas, garantiza excelente transmisión de calor y máxima resistencia. Su durabilidad está comprobada frente a condiciones extremas: opera en rangos de −20 °C a 110 °C, soporta radiación UV intensa y resiste sin deterioro aguas tratadas con cloro o sal”, resumió Pedro Arnoletto, fundador de CheapSun.
Una de sus principales ventajas es el mínimo mantenimiento, lo que asegura tranquilidad y ahorro a largo plazo. A eso se suma su relación calidad- precio, que lo convierte en una opción confiable tanto para familias como para instaladores que buscan un producto sólido, eficiente y duradero para sus clientes.
Su instalación es rápida y sencilla, gracias a los anclajes adaptables que permiten montarlo en distintas superficies con seguridad. Además, CheapSun ofrece una herramienta online gratuita para calcular la cantidad exacta de colectores necesarios según la pileta y la región, garantizando soluciones a medida.
“En definitiva, combina innovación, resistencia y eficiencia en un climatizador solar de fabricación nacional, pensado para disfrutar más tiempo de la pileta de manera sustentable, económica y con garantía de calidad”, apuntó Arnoletto.
“La búsqueda de mayor confort impulsó el desarrollo de tecnologías que permiten disfrutar de nuestros espacios recreativos por más tiempo. En esa línea, los sistemas de climatización solar para piscinas emergen como una solución innovadora y sostenible, extendiendo la temporada de uso y los horarios diarios, a la vez que generan un ahorro significativo en comparación con sistemas basados en energías no renovables”, destacó Horacio Pappalardo, socio gerente de HI Sol Energías.
La firma trabaja con el sistema de mantas de caucho EPDM. Esos colectores están compuestos por una serie de capilares por donde circula el agua. Al entrar en contacto con una superficie de alta absorción solar, el agua se calienta y regresa a la piscina a una temperatura mucho mayor. Este sistema puede elevar la temperatura del agua en más de 10º C dependiendo de la época del año, con el objetivo de mantenerla entre 27º C y 33º C, o incluso más.
Una de las grandes ventajas del EPDM es su composición. Es resistente al cloro, la salinidad, el amonio y los cambios de pH, lo que garantiza una prolongada vida útil. Además, resiste a la intemperie, a los rayos UV, al granizo y a las heladas, lo que lo convierte en una inversión duradera.
La instalación de estos sistemas es sencilla; se adapta a piscinas ya construidas o a proyectos nuevos en sólo 1 o 2 días. Se integra en el circuito de retorno de la sala de máquinas, es 100% automatizado y requiere un mantenimiento mínimo.
“Su diseño adaptable permite que sea colocado en planos horizontales, verticales o inclinados. Incluso, puede ser removido con facilidad si se necesita realizar algún mantenimiento en la cubierta o un traslado”, remarcó Pappalardo.

Tips a tener en cuenta
“Para cuidar los grados de temperatura logrados durante el día es conveniente (no excluyente) usar una manta térmica sobre el espejo de agua; eso evita la pérdida de temperatura en la noche”, dice Pablo Salva, de Cálido 20 grados.
En materia de instalación, es preciso contar con una superficie del 80% del tamaño de la piscina para colocar los paneles y que esté lo más cerca posible de ella (por ejemplo, para un espejo de agua de 20 metros cuadrados se necesitan 16 metros cuadrados para los paneles). Además, es necesario que reciba luz solar durante la mayor parte del día.
Los paneles se pueden instalar en el techo, pues son muy livianos (sólo 5 kg/m2 con carga de agua). La clave es que reciban luz solar directa de 10 a 16. El tiempo de instalación es de 1 día, pero se puede extender hasta 2 semanas en caso de necesitar estructura donde apoyar los paneles.
“No usa combustibles fósiles para calentar el agua, es silencioso, no requiere mantenimiento y prolonga la temporada de uso de la pileta. ¿Qué más se puede pedir”, concluyó Salva.

Precios de referencia
Para climatizar una piscina de 4x8 metros, estándar: sistema instalado, llave en mano, aproximadamente $ 3.500.000
El costo de la instalación depende de la complejidad de la arquitectura.
