Este jueves, Los Pumas arribarán a Córdoba para comenzar una nueva concentración de cara al arranque del Rugby Championship 2025, certamen que disputará uno de sus partidos de la primera fecha en el estadio Mario Alberto Kempes. El sábado 16 de agosto será el día “D”, el del enfrentamiento entre el seleccionado argentino de rugby y los All Blacks, y este lunes se conoció la lista de 34 convocados para este cotejo y la del sábado 23, en Vélez. Entre los citados, hay seis jugadores cordobeses, entre ellos, Juan Cruz Mallía.
El polifuncional back, que milita en el Toulouse de Francia y fue campeón (una vez más) del Top 14, cumplió con el debido descanso y tiene su primera convocatoria tras los cuatro partidos que ya disputaron Los Pumas en esta temporada. Para “Juanchi”, jugar en Córdoba es muy especial, y ni hablar si es ante una leyenda como el seleccionado de Nueva Zelanda. “All Blacks es un seleccionado mítico del rugby. Tiene algunas particularidades, como el vestirse de negro, hacer un ritual (haka) antes de los partidos, que hace que para un jugador de rugby siempre sea muy especial enfrentarlo”, explicó el jugador formado en Jockey CC.
Y continuó: “Para ellos, el rugby es como para nosotros el fútbol. Ves en las plazas de Nueva Zelanda, en la calle, a la gente jugando al rugby. Lo tienen en sus genes, en su cultura. Entonces, para un jugador de rugby, jugar contra los All Blacks es un partido diferente”.

Diferente por donde se lo mire. Enfrentar a “los hombres de negro” y a toda su mística es el sueño de cualquier chico que juega al rugby en algún lugar del mundo. Córdoba no es la excepción. Y Mallía tampoco. Juan Cruz no sólo jugó ante los All Blacks, también les ganó (Argentina derrotó a Nueva Zelanda en tres oportunidades). Y el intimidante haka no hizo mella en el carácter del cordobés.
–¿Hay tiempo de pensar en algo cuando Nueva Zelanda está enfrente realizando el “haka"?
–Personalmente, me voy metiendo en el partido y me motiva a decir: “Acá estamos, se viene el partido y estamos listos para entrar a la cancha”. Ellos tienen su ritual y uno se va concentrando de esa manera y se va motivando también con lo que tiene enfrente.
–Nueva Zelanda ya dio a conocer la lista, ¿sos de fijarte quiénes están convocados?
–Sí, me gusta ver quiénes son los que vienen y, obviamente, después analizar los diferentes equipos que pueden poner en cancha. Hoy en día, los All Blacks deben estar en el top tres de los mejores seleccionados del mundo; sin dudas, vamos a jugar contra uno de los mejores equipos del planeta, va a ser un partido durísimo, asperísimo, pero nos tenemos que preparar para eso.

–El hecho de jugar dos veces al año con ellos o con Sudáfrica, bicampeón mundial vigente, ¿ayudó al crecimiento de nuestro rugby y de sus jugadores?
–Sin dudas. El Rugby Championship es casi un Mundial todos los años para nosotros, porque jugamos contra Australia, Sudáfrica y Nueva Zelanda, que son las mejores selecciones del mundo. Jugamos seis partidos contra ellos y, en un Mundial, si llegás a la final, serían siete. Entonces, prácticamente es como jugar un Mundial todos los años. Con el tiempo, hemos ido creciendo; desde que arrancó el Championship, al principio no podíamos ganar ningún partido, después se ganó uno, ahora dos, tres… y, bueno, vamos creciendo, vamos progresando. Esperemos que este año sea aun mejor que el anterior.
En 2024, por primera vez desde que Argentina juega el torneo del Hemisferio Sur, Los Pumas les ganaron a todos sus rivales en una misma temporada. Más allá de la importancia de vencer a All Blacks en su tierra, el triunfo más resonante de los dirigidos por Felipe Contepomi fue el logrado en Santiago del Estero ante los Springboks, campeón en las últimas dos copas del Mundo.

Esta vez, la parada será Córdoba, y a “Juanchi” se le ilumina la cara cuando habla de lo que significa jugar en casa. “Vamos a distintas provincias y los chicos (sus compañeros de equipo) son bien locales; están sus familias, sus amigos. Muchas veces me preguntaron por qué no jugábamos en Córdoba y yo no tenía respuesta. Ahora voy a poder vivirlo de la misma manera que muchos de ellos, con mi familia y con mis amigos del club, en el Kempes”, describió el fullback.
Y cerró: “Tengo el recuerdo de haber ido a ver ese partido y lo que me generó en ese momento ver a Los Pumas (en 2014, ante Escocia) en Córdoba, y ahora poder vivirlo del otro lado me parece una locura. Para mí, es un sueño”.