Esteban Ocon, el experimentado piloto francés, encontró en Haas la escudería que, según sus propias palabras, “buscaba”. Sus declaraciones ofrecen una mirada reveladora sobre las diferencias de ambiente y metodología entre su actual equipo y Alpine, donde militó durante cinco años y del que salió a mediados de 2024.
Este contraste adquiere una relevancia particular al considerar que hoy Alpine cuenta entre sus filas con el argentino Franco Colapinto, quien se desempeñaría en un entorno que Ocon describe con cierta frustración.
La experiencia agria en Alpine
Antes de su partida oficial de Alpine, Ocon ya expresaba su descontento. Lamentó que en Enstone no siempre se les “escuchaba” y que problemas señalados hace cinco años persistían, empeorando en lugar de resolverse. Describió una falta de comunicación en la que, si no se hablaban las cosas, se volvían a repetir.
Más allá de las cuestiones técnicas, Ocon fue muy crítico con la motivación dentro de su antiguo equipo. Relató haber visto a “gente desmotivada” trabajando en el paddock de la Fórmula 1, una situación “dura” para un piloto que “pone su corazón y sudor en el trabajo”. Afirmó haber observado a miembros del equipo “pensando en su check-in del lunes”, lo que generaba un contraste notorio con su propia dedicación.
Haas: el entorno “saludable” y proactivo
En Haas, la valoración de Ocon un año y 14 grandes premios después de su llegada es categórica: ha encontrado un “entorno saludable”. Destaca una cultura de apertura donde “nadie se esconde detrás de nada”. Si algo no se hace bien, se habla de ello de inmediato al final de la carrera, con la esperanza de no repetirlo, lo que considera “la clave” para evitar errores persistentes.
El francés quedó particularmente impresionado con la motivación del equipo y su capacidad de reacción. Un ejemplo claro fue el rediseño de su volante con doble embrague en solo un mes, algo que “nunca vio que otro equipo lo hiciera, ni siquiera los grandes”. Esta eficiencia, en un equipo que se considera “el más pequeño”, es para Ocon una señal de “primer nivel”.
La escudería también demostró su resiliencia tras un pobre desempeño en el Gran Premio de Australia, donde ambos coches fueron inestables y quedaron al fondo de la tabla. Ocon relató que, tras esa “bomba”, nadie se escondió y todo el equipo se unió para solucionar los problemas. Esto les permitió dar “completamente la vuelta a la situación” en China, lo que Ocon atribuye al “ambiente que hay dentro de este equipo” y no a la suerte.
A pesar de que Haas se encuentra apenas noveno en el campeonato de constructores, ya suma 35 puntos en la temporada, con un promedio de 2,50 por gran premio, su segunda mejor media en diez temporadas en la F1.
La mirada en Franco Colapinto y el futuro de Alpine
Las observaciones de Ocon sobre la desmotivación y la falta de comunicación en Alpine son relevantes, dado que Franco Colapinto, el talentoso piloto argentino, ha sido integrado en la órbita de Alpine como parte de su programa de desarrollo y, según la información disponible públicamente (que no se encuentra en las fuentes proporcionadas en esta conversación), es actualmente piloto de esta escudería.
La experiencia de Ocon sugiere los desafíos culturales y operativos que Colapinto podría enfrentar o, por el contrario, los cambios positivos que la escudería francesa podría haber implementado para superar las críticas de su ex-piloto.
Mirando hacia el futuro, Ocon es optimista para Haas, especialmente con las nuevas reglas técnicas de 2026. “Solo necesitamos una plataforma más rápida”, insiste, confiando en que si tienen “algo decente con lo que trabajar en la pista”, estarán “listos para enfrentarse a los grandes, 100%”. La visión de Ocon subraya la importancia del ambiente de trabajo y la proactividad en el competitivo mundo de la Fórmula 1.