El tesorero de la AFA, Pablo Toviggino, encaró con dureza al periodismo deportivo argentino y puso el foco en figuras mediáticas que, según él, “se convirtieron en periodistas-políticos y oportunistas”. La crítica surgió a partir de la difusión —vía X— de audios del exentrenador Ricardo Caruso Lombardi en los que, entre otras cosas, cuestiona al presidente Claudio Tapia.
Toviggino replicó los mensajes y acompañó la publicación con una contundente lectura: sostuvo que Caruso “admite que su único argumento es el odio” y lo calificó de “extorsionador”. En el hilo, el dirigente reprodujo pasajes en los que, según su interpretación, el exDT plantea que “empezó una ‘guerra’” y asegura que eso no habría ocurrido “si el titular de AFA se ‘hubiera arrimado’ a hablar con él”.
El tesorero no dudó en cargar contra quienes, a su entender, denigran la competencia: mencionó a clubes de la Liga Profesional con términos descalificadores y aseguró que “odian al fútbol argentino, odian lo popular”, reivindicando al fútbol como “el más popular de los deportes”.
Además, en la misma publicación Toviggino aludió —sin nombrarlo— al conductor Mariano Closs, figura habitual en debates arbitrales, y recordó una denuncia antigua que pesa sobre el periodista, en un tono que añadió más leña a la polémica.
La fuerte frase de un jugador de Puerto Madryn
La reacción en el ámbito futbolístico no se hizo esperar. Facundo Giacopuzzi, defensor de Deportivo Madryn —equipo que este fin de semana disputará las semifinales del Reducido de la Primera Nacional ante Deportivo Morón—, respondió con dureza a los cuestionamientos vertidos desde algunos medios y por exentrenadores. Sin mencionar a Caruso Lombardi por nombre, Giacopuzzi fue explícito con su opinión: “Hay un gordo boludo que se pone los domingos al mediodía a decir pelotudeces”, dijo en diálogo con Jornada (Chubut).
El jugador defendió el trabajo del plantel patagónico y reclamó que los críticos presencien las prácticas: “Me encantaría que cada uno de todos los pelotudos vengan en la semana para ver cómo entrenamos, creo que somos el equipo que más se merece el ascenso”. Y dejó una advertencia para los que hablan desde la tribuna mediática: “Nos propusimos callarle la boca a todos los boludos que hablan de atrás. Dudas habrá siempre, espera un par de horas y van a seguir saliendo cosas, el sistema se maneja así”.
El cruce expone una tensión creciente entre dirigentes, exentrenadores reciclados como opinadores y actores del fútbol menor que exigen respeto por su trabajo en una instancia decisiva del campeonato. La polémica, por ahora, continúa abierta en las redes y en el ecosistema mediático.

























