Un hecho insólito empañó la celebración de Tottenham Hotspur tras la reciente final de la UEFA Europa League: Cristian “Cuti” Romero, junto a sus compañeros Heung-min Son y Rodrigo Bentancur, no recibió su medalla en el campo de juego y tuvo que esperar a recibirla en el vestuario.
Según explicó la UEFA en un comunicado oficial, el inconveniente se debió a “una discrepancia inesperada en el conteo de jugadores”, ya que más integrantes del plantel de los esperados –incluidos lesionados– participaron de la ceremonia. En el escenario dispuesto para la entrega de premios había solo 30 medallas disponibles, cuando el reglamento indica que deben entregarse 50 por equipo, incluyendo jugadores y cuerpo técnico.
“Desafortunadamente, no tuvimos suficientes medallas disponibles en el escenario durante la ceremonia de trofeos”, reconoció la UEFA. “Las medallas que faltaban fueron rápidamente entregadas al equipo campeón en el vestuario, acompañadas de nuestras más sinceras disculpas”.
El caso de Son fue especialmente llamativo: en plena premiación, no recibió medalla y solo fue saludado con un abrazo por Aleksander Čeferin, presidente del organismo. Para el surcoreano, al igual que para Romero y Bentancur, este título era uno de los primeros de su carrera profesional, lo que hizo el momento aún más significativo.
La situación generó críticas porque jugadores como Sergio Reguilón –que no participó del torneo– y Will Lankshear, cedido al West Bromwich Albion durante la segunda parte de la temporada, sí recibieron sus medallas. También accedieron a ellas los lesionados Timo Werner, James Maddison y Lucas Bergvall.
La UEFA corrigió el error minutos después en los vestuarios, pero la escena ya había quedado registrada: el campeón sin su medalla en el escenario principal.