El mundo del fútbol cordobés fue testigo este jueves de un nuevo capítulo en la historia de Instituto con la presentación oficial de Daniel Oldrá como su nuevo director técnico.
En una conferencia de prensa que desbordó expectativas y emociones, el experimentado entrenador, con una larga trayectoria en Godoy Cruz, no dudó en calificar este nuevo reto como “el desafío más importante que voy a tener en mi vida”.
Pero, detrás de la formalidad del evento, se tejieron una serie de factores y conversaciones que llevaron al “Gato” a tomar las riendas de la Gloria.
Oldrá se mostró con una característica que lo pinta de cuerpo entero: la simpleza.
A sus 58 años, decidió tomar un desafío enorme como venir a la Gloria cuando muchos lo imaginaban lejos de un banco de suplentes de Primera División. Dejó atrás la comodidad del Tomba para volver a la “incomodidad” que genera dirigir en el fútbol argentino.
Ahí estuvo el gran acierto de la directiva de Instituto: en buscar un DT que no estaba en el horizonte. Un “tapado”.
La presentación estuvo encabezada por el presidente del club, Juan Manuel Cavagliatto, quien le dio una sentida bienvenida diciendo: “Te deseo lo mejor en este comienzo, en este club que amamos”.
Cavagliatto fue un motor clave en el arribo del “Gato”, ya que tuvo reiteradas charlas en las que le contó lo que significa Instituto y el ligazón de su familia con la institución. En fin, su compromiso y “locura” por el crecimiento albirrojo.
El manager, Federico Bessone, se sentó a la izquierda de Oldrá ante los medios. Su figura fue también clave para que esta historia tuviera este desenlace.
A modo de broma, Oldrá contó que un currículum suyo llegó a manos de Bessone, quien activó el “Plan Gato” inmediatamente.
El propio entrenador lo confirmó al iniciar su intervención con un contundente: “Estoy acá por ellos dos”.
Tanto Cavagliatto como Bessone jugaron un papel crucial al convencer a Oldrá de tomar este nuevo rumbo en su carrera, algo que él mismo admitió no tener en sus planes inmediatos.
“Ellos fueron los que me entusiasmaron”, reveló Oldrá, destacando la visión del proyecto albirrojo como un factor determinante en su decisión de dejar atrás casi 30 años ligados a la institución mendocina, un lugar que ya todos conocen.
Bessone, por su parte, compartió la admiración que siente por Oldrá, con quien compartió vestuario en el pasado (fueron compañeros de equipo en Godoy Cruz), y la convicción de que era el hombre indicado para liderar el nuevo ciclo de Instituto.
“Cuando estuvo la posibilidad dije: es él, y Cavagliatto pensó lo mismo”, afirmó Bessone sobre su insistencia para concretar la llegada de Oldrá.
Desde Troglio a Dabove: los detalles de la negociación
Una vez que se dio por concluido el ciclo de Pedro Troglio, Instituto intentó moverse rápido para conseguir un entrenador.
Es que más allá de que quedaban cuatro fechas del Torneo Apertura, se viene un nuevo mercado de pases y un segundo semestre picante.
Era importante que el nuevo DT ya conociera el plantel.
Tras quedar en el camino otras opciones (como Facundo Sava y Leonardo Madelón), todos los caminos apuntaron a Oldrá, que pidió “6 o 7 días” para lograr una salida de Godoy Cruz, que no iba a ser sencilla.
En ese interín, “el Gato” habló con Troglio y también con Diego Dabove, con quien tiene una gran amistad por los años compartidos en el Tomba.
El nombre propio de Dabove resonó en la presentación. “El Gato” confesó haber consultado con Dabove antes de aceptar la propuesta, recibiendo de su parte una recomendación elogiosa sobre Instituto, describiéndolo como un “gran club” con similitudes a Godoy Cruz.
“Él me dijo que es un gran club, que vaya tranquilo y que es algo parecido a lo que había en Godoy Cruz”, detalló Oldrá, subrayando la influencia de su amigo en la decisión final.
“De Diego, imagínense que se inició conmigo, así que un poco el promotor de ese gran entrenador fui yo, así que él también tuvo su granito de arena porque él me dijo que era un gran club y que fuera tranquilo”, añadió Oldrá sobre la conversación con Dabove.

Los colores: azul y blanco, rojo y blanco
Un detalle no menor que surgió durante la conferencia fue la curiosa conexión de Oldrá con los colores rojo y blanco, los mismos que visten a Instituto.
Tras una larga trayectoria ligada al azul y blanco de Godoy Cruz, el entrenador recordó sus pasos por River Plate, también rojiblanco, como jugador.
Eso generó un momento risueño entre Oldrá, Bessone y Cavagliatto, ya que el color azul y blanco en Córdoba está emparentado con Talleres.
“Mirá, yo jugué en el fútbol, excepto en Godoy Cruz, me fui a River... no sé si es el destino, pero eran los colores rojo y blanco. Y ahora Instituto es rojo y blanco, así que no hay muchos colores más para mí, me parece. O son azules y blancos o rojo y blancos”, dijo con una sonrisa.
Inmediamente, tanto Cavagliatto como Bessone le respondieron: “Acá son rojos y blancos, nada de azul y blanco”, con humor, y pequeña chicana hacia barrio Jardín.
En cuanto a lo estrictamente futbolístico, Oldrá se mostró cauto y respetuoso del trabajo previo realizado por Daniel “Miliki” Jiménez.
Su prioridad inmediata es conocer al plantel y, a partir de ahí, adaptar su idea de juego a las necesidades del equipo.
“Primero quiero conocer al plantel, a los chicos, y luego puedo acomodarme a la idea que medianamente tengo. No va a cambiar mucho de lo que viene haciendo ´Miliki´ (Daniel Jiménez). En el último partido, el equipo anduvo bien, estuve cerca de ellos y eso me entusiasmó”, dijo el DT.
Si bien no adelantó detalles sobre su esquema táctico, dejó claro que buscará un equipo competitivo y que no se encasillará en una sola forma de jugar.
Además, manifestó su interés en seguir de cerca el desarrollo de las divisiones inferiores, considerando a los jóvenes talentos como el futuro del club.
“Lo principal son los chicos de inferiores, lo que hablo con ‘Fede’, lo que puedo conocer de Primo (coordinador de inferiores)... Los chicos son el futuro del club y siempre voy a estar cerca. Si no, no hubiera venido. Esa es la realidad”, afirmó con convicción.
“Creo que los futuros de los clubes en la Argentina somos los clubes formadores y más por los últimos tiempos que se viven”, añadió sobre la importancia de las inferiores.
El debut de Oldrá en el banco albirrojo se hará esperar hasta el encuentro contra Sarmiento de Junín. El entrenador explicó que necesitaba unos días para desligarse de su anterior club después de tres décadas de dedicación.
“No era fácil salir de mi club, tengo 30 años allá. Le había pedido a ‘Fede’ (Bessone) que me dieran siete u ocho días porque no es fácil. Sinceramente, les vuelvo a repetir, el logro que ha tenido ‘Fede’ creo que ha sido para mí super importante porque no creo que en otro a otro club hubiera ido”, detalló Oldrá sobre su demora en asumir el cargo.
Esta muestra de compromiso y respeto por su pasado habla a las claras de la integridad de Oldrá, un valor que espera transmitir también en su nueva etapa en Instituto.
Con la mira puesta en la clasificación para los play-offs, Daniel Oldrá asume este nuevo desafío con ilusión y un fuerte compromiso con la institución.
“El primer objetivo de hoy es que estos tres partidos podamos clasificar. Eso es lo principal. Y, después, de soñar que me pueda quedar muchos años acá”, manifestó sobre sus expectativas inmediatas.
“Vamos a dar todo por este club. Les pido que estén, que alienten y que tengan fe. Nosotros vamos a dejar el alma”, fue su mensaje directo a la hinchada.
Su experiencia, su pasión por el fútbol y el respaldo de Cavagliatto y Bessone son los pilares sobre los que se construirá este nuevo ciclo en la historia de Instituto, un ciclo que el propio Oldrá espera que sea tan exitoso como su legado en Mendoza.
“Espero tener un gran año y que podamos hoy, o el día de mañana, contar que lo que hice por acá fue también tan bueno como lo que me pasó en Mendoza”, concluyó con esperanza el nuevo entrenador de la Gloria.
El cuerpo técnico de Oldrá:
Ayudantes de campo:
- Nicolás Olmedo.
- Nelson Ibáñez.
- Guillermo Franco.
- Alexander Oldrá.
Preparadores físicos:
- César Garro.
- Nicolás Longo.