El entrenador del Atlético de Madrid, Diego Simeone, mostró su enojo este jueves con la FIFA por la gran distancia que separa los vestuarios del campo en los estadios estadounidenses que reciben el Mundial de Clubes.
“A veces es imposible volver rápido a la cancha. Cuando llegamos al vestuario pasaron cuatro o cinco minutos desde que pitó el árbitro, estuvimos caminando ese tiempo para poder entrar. Imagino que les pasa a todos”, se quejó el técnico argentino en la conferencia de prensa tras la victoria 3-1 frente al Seattle Sounders de la MLS.
“Después te multan, y por eso quiero explicarlo para los que no entienden. No es que uno quiera demorar a propósito, pero las distancias son larguísimas”, agregó.
La crítica de Simeone recordó lo que ocurrió en la última Copa América 2024, también disputada en Estados Unidos, país que además organizará junto a México y Canadá el Mundial 2026. Durante ese torneo, varios entrenadores fueron sancionados por regresar tarde al campo tras el descanso, como Lionel Scaloni (Argentina), Marcelo Bielsa (Uruguay), Ricardo Gareca (Chile) y Fernando Batista (Venezuela).
La Conmebol, en su momento, aclaró que el tamaño de los estadios no era excusa para justificar los retrasos. Por su parte, el técnico de Perú, el uruguayo Jorge Fossati, señaló que “en varios estadios, el vestuario está como a un kilómetro, y eso hay que tenerlo en cuenta”.