Carlos Alberto Tevez entró al Mundo Talleres sin importar lo convulsionado que estaba. Ya conocía la actualidad del plantel por haber sido compañero de Emanuel Reynoso y ser amigo del asambleísta Alejandro Accieto y de Julio Buffarini, a quien supo llevar a Independiente, tras su salida de la “T”.
Y una de las novedades que ofreció el debut del “Apache” en la “T” fue la reaparición de Juan Gabriel Rodríguez como titular y en la zaga junto con el juvenil Santiago Fernández.
El defensor pasó de “prescindible” para Diego Cocca a ser titular. Literalmente. Es más, por segunda vez, ya que el capítulo inicial fue en 2024 y para esta misma época.
Ahora
Tevez decidió recuperar a Rodríguez por varias razones. Lo había dirigido en Rosario Central hace tres años, donde tuvo su debut absoluto como entrenador. Además, no había visto pleno a Matías Catalán, quien no juega desde que se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla derecha, en aquel lejano 22 de setiembre de 2024.
Otra de las razones fue la salida de escena de Juan Carlos Portillo, el habitual titular, quien se le plantó a la dirigencia porque quiere salir a River. Antes ya se lo había dicho a Cocca y Tevez heredó esta situación.
El último partido de Rodríguez había sido el 15 de mayo ante Alianza Lima. Ingresó al final del penúltimo partido del Grupo D de Libertadores de ese Talleres conducido por Mariano Levismas y después de una lesión en el tendón de Aquiles. En el Apertura, había reaparecido el 3/5 tras un desgarro sucedido frente a Belgrano, el 30/3.
El inicio de la era Diego Cocca implicó que fuera un cierre de ciclo en Talleres para Cristian Tarragona, Blas Riveros, Tomás Cardona, Marcos Portillo, Sebastián Palacios y el propio Rodríguez.
El primero en irse fue “Tarra” (Unión), luego, el paraguayo (Cerro Porteño). El delantero estaba a préstamo en la “T” y firmó con Unión de Santa Fe.
El resto de los futbolistas se quedaron entrenando en el Card, mientras el plantel se fue de gira a Buenos Aires. Tomás Cardona (jugó tres partidos) se fue Tigre, Marcos Portillo pasó a Platense y solamente quedaron Sebastián Palacios (aún no acordó su rescisión) más el propio Rodríguez.
No era la primera vez que le pasaba. Pero el defensor se hizo de paciencia. Llegó una chance de salir a Gimnasia LP y un sondeo de Newell’s, pero nada prosperó. Sus compañeros lo apoyaron. No por nada había sido sub capitán de campo.
Es más, aprovecharon las visitas de Alan Franco (Sao Paulo) y de Rodrigo Garro (Corinthians) para reunirse y subir una foto.
Estaban el capitán Guido Herrera, Matías Catalán, Gastón Benavídez y Valentín Depietri, además de los mencionados. Habían sido parte de aquel Talleres de Javier Gandolfi que consiguió la clasificación a la final de Supercopa Internacional que se ganó en definición por penales ante River el 5 de mayo.
La salida de Cocca cambió todo Rodríguez, quien volvió a jugar y en un partido exigente. Se equivocó en el tanto de Alexis Cuello, pero luego se terminó acomodando con Fernández, justamente quien empezó a tener lugar en ocasión de su último desgarro ante Belgrano.
Volvió a un Talleres de emergencia para poner el hombro.
La primera vez
Después de un gran semestre en el que el Talleres de Walter Ribonetto había quedado puntero de la Liga 2024 y en octavos de final de Copa Argentina y Libertadores. Antes de viajar a Rusia, Rodríguez pasó a entrenar aparte conjuntamente con otros compañeros como Gustavo Bou, Nahuel Bustos y David Romero, quienes se fueron poco tiempo después a un equipo de Entre Ríos, San Lorenzo y Unión La Calera de Chile, respectivamente.
Rodríguez tuvo la chance de salir pero no hubo acuerdo. Su representante Ignacio Vilariño consiguieron acercó una oferta de Liga de Quito, pero para Talleres no fue suficiente. Luego, fue la “T” la que consiguió una propuesta para ir a Tigre, aunque al central no le cerró.
Por pedido de sus compañeros y de “Tino”, volvió a entrenar en un momento difícil. Y en su regreso, marcó un gol.
Fue el 2-1 sobre Independiente Rivadavia por la 8ª fecha de la Liga Profesional, jugada el 17 de agosto, y literalmente terminó el juego, después del chequeo de VAR. Definió un partido en su regreso al primer equipo en una apuesta tremenda por volver al equipo titular.

“Pasé momentos feos, mi familia y mis compañeros me ayudaron. Dimos un paso adelante y una muestra de carácter. Obvio que está en las posibilidades clasificar, iremos al Monumental a buscarlo. Ojalá podamos hacerlo”, dijo Rodríguez, apenas terminado aquel juego.
“Fue muy importante, en lo personal y más que nada en lo grupal. Lo necesitábamos. Tenemos una final en River. ¿Qué pasó en el mercado de pases? Fassi salió aclararlo un poco. De entrada le dije que me quería quedar. La oferta estaba. Un poco querían que me vaya. Pero acá estoy. Dije que me quería quedar. ¿La cinta de capitán? Sentí mucho orgullo. Se me cruzó la familia, mi hija, amigos, toda la gente que estuvo detrás de este momento que pasó”, agregó en zona mixta.
Su psicólogo Marcelo Roffé se expresó en redes. “Juan querido!!! todo llega si uno está dispuesto a entregar todo por ese objetivo: felicitaciones Juan, después de un buen año, te ningunearon de una manera insólita y te sacaron de la pretemporada. Te quisieron sacar de encima de prepo y vos te plantaste. Hoy te pidieron disculpas y volviste a ser titular, capitán y a hacer un gol que vale un partido. Solo vos sabes lo que sufriste...”, arrancó el mensaje del reconocido profesional que trabajó en la selección argentina.
“Muchísimas gracias Marce! Agradecido por estos 5 años de trabajo y aprendizaje, sin dudas fuiste muy importante en estos momentos que me tocó transitar, injustos o no. Seguimos adelante! Y este premio al esfuerzo es grupal así que disfrutemos!”, fue la devolución del propio Rodríguez, tratando de cerrar un capítulo y abrir otro que fue igualmente duro.
Talleres levantó la copa ante River y fue eliminado de las tres competiciones siguientes, hubo cambios de DT y Rodríguez fue aquejado por nuevas lesiones. Hasta quedar como prescindible.
Vive un nuevo regreso.