Instituto continuará este martes en La Agustina con sus entrenamientos rumbo a lo que será el partido del sábado a las 14.30 frente a San Lorenzo.
Más allá del 0-4 ante Unión del viernes, la imagen preocupó y obliga a replanteos. Por eso el plantel deberá corregir un montón de cuestiones de cara al encuentro en el Nuevo Gasómetro, por la sexta fecha del Clausura.
El DT Daniel Oldrá sabe que no hay margen: la respuesta debe llegar rápido y con cambios. Uno de ellos es inevitable: el capitán Fernando Alarcón vio la tarjeta roja y no podrá estar ante el Cuervo.
Su ausencia abre la puerta a dos candidatos. Uno es Nicolás Zalazar, central derecho de 1,85 metros, que llegó a préstamo desde Junior de Barranquilla. El otro, Agustín Bravo, defensor zurdo de 24 años con pasado en Atlético de Rafaela y Rosario Central.
Bravo, que todavía no debutó en la Gloria, aparece como la opción más natural para reemplazar a Alarcón, ya que puede ocupar la zaga por izquierda con mayor facilidad.
Su recorrido incluye 53 partidos en la Primera Nacional y un paso por Central marcado por altibajos y por una dura lesión de ligamentos que lo dejó varios meses afuera. En Alta Córdoba lo ven como una apuesta de mediano plazo: joven, con margen de crecimiento y con una zurda que le permite dar salida limpia desde el fondo.
Claro que la baja de Alarcón no sería la única modificación. Un resultado como el que sufrió Instituto suele tener consecuencias mayores. Oldrá deberá mover piezas para encontrar reacción en un equipo que, hasta aquí, alternó buenas intenciones con rendimientos irregulares.
El desafío no es menor. San Lorenzo, en su estadio, siempre representa una prueba exigente. Para Instituto será una oportunidad de recuperar confianza y enviar un mensaje: que el tropiezo ante Unión fue un accidente y no una tendencia. El sábado, en el Gasómetro, la Gloria sabrá si está lista para levantarse. O si se mete sino de lleno en la lucha por la permanencia.
