Boca no pudo con River en el Monumental y el 1-2 merecía el análisis del entrenador Fernando Gago y el referente Marcos Rojo, que se quejaron del árbitro Nicolás Ramírez.
“Los comentarios que tuve con el árbitro fueron porque en los primeros 20 minutos ya teníamos tres amarillas y me pareció un poco exagerado. Condicionó todo en poco tiempo, dejándonos en una situación de posibilidades de cambio en el segundo tiempo porque el juego era muy friccionado",”, arrancó Gago, que consideró que a Boca mereció mejor suerte.
También explicó que jugar con tres defensores se debió a las características de sus jugadores y a lo que River podía dar. “Íbamos a tener presión interna por el juego de ellos”, sostuvo.
“Me voy con bronca por el resultado porque en el segundo tiempo tuvimos chances y errores”, opinó. “En el primer tiempo nos costó tener la pelota”, añadió.
Gago valoró que el funcionamiento defensivo estuvo a la altura de lo esperado. “Estábamos defendiendo bien en una zona muy alta. Jugar con tres defensores obliga a tener el control del partido”.
Después del DT habló Marcos Rojo, que fue más contundente que Gago sobre la crítica al árbitro. “Iban 20 minutos y ya había sacado tres amarillas. No entiendo que estaba viendo el referí. Siempre lo mismo… Ya es la segunda vez que nos dirige este muchacho”.
Rojo también le mandó un mensaje a la gente de Boca: “Que se quede tranquila que vamos a seguir trabajando y que vamos a tratar de terminar punteros en la zona”.