El foco de atención en la previa del debut de River Plate en el Mundial de Clubes contra el Urawa Red Diamonds, programado para este martes a las 16 en el Lumen Field de Seattle, recae sobre el árbitro principal: el alemán Félix Zwayer.
Con 44 años, Zwayer es un árbitro con un historial marcado por una de las polémicas más grandes en la historia del fútbol alemán, donde fue acusado de arreglar partidos.
La mancha en la carrera de Zwayer se remonta al año 2004, al inicio de su trayectoria arbitral. En aquel entonces, se vio envuelto en un gran escándalo que desbarató una red de apuestas que generaba millones de euros en el fútbol alemán.
Dos árbitros, Robert Hozyer y Dominik Mark, fueron condenados a prisión por “arreglar” más de 10 partidos. Hozyer recibió una pena de dos años y cinco meses, mientras que Mark fue sentenciado a un año y medio.
Félix Zwayer se encontraba como juez de línea en uno de estos partidos amañados. El periódico Die Zeit lo acusó de haber aceptado 300 euros para favorecer a uno de los equipos.
Aunque en el juzgado Zwayer declaró haber sido inducido por Hozyer y negó haber recibido dinero directamente por el amaño, su participación en el ocultamiento de información le valió una inhabilitación de seis meses.
A pesar de este oscuro antecedente, Zwayer logró “reconvertirse” y ascendió hasta ser considerado uno de los mejores árbitros del mundo. Su carrera lo llevó a dirigir en la Bundesliga, la Champions League, la Europa League y la Nations League, entre otras competiciones de prestigio. Incluso, fue el árbitro de la final de la última Europa League entre Tottenham y Manchester United.
También participó en la final de la Nations League 2023 entre España y Croacia y tuvo cuatro apariciones en la Eurocopa 2024.
Sin embargo, las dudas sobre su imparcialidad y su pasado lo han seguido. El caso más notorio ocurrió en 2021, cuando el entonces jugador del Borussia Dortmund, Jude Bellingham, protestó airadamente tras la derrota 3-2 de su equipo contra el Bayern Múnich, a raíz de un penal no cobrado a favor del Dortmund.
Al finalizar el partido, Bellingham hizo una declaración contundente, aludiendo directamente al historial de Zwayer: “Si le das el partido más importante de Alemania a un árbitro que ya ‘amañó’ partidos antes, ¿qué esperabas?”.
Estas declaraciones le costaron a Bellingham una multa de 40 mil euros impuesta por la Federación Alemana de Fútbol. Curiosamente, Zwayer y Bellingham se reencontrarían más tarde en las semifinales de la Eurocopa 2024.
Pese a las controversias y las acusaciones, tanto la UEFA como la FIFA consideran a Félix Zwayer un árbitro “intachable”.
Por ello, fue designado para dirigir el debut de River Plate en el Mundial de Clubes.
Para este encuentro, Zwayer estará acompañado por sus asistentes, también alemanes, Robert Kempter y Christian Dietz.
El cuarto árbitro será el neozelandés Campbell-Kirk Kawana-Waugh. En la cabina del VAR, la diversidad será aún mayor, con el alemán Bastian Dankert como VAR, el croata Ivan Bebek como AVAR y el marroquí Hamza El Fariq como SVAR.
Esta particularidad de tener autoridades de cuatro países diferentes es típica de torneos internacionales de gran magnitud.
Nacido en Berlín el 19 de mayo de 1981, Zwayer debutó en la Bundesliga en 2009 y es internacional desde hace más de una década.
Se le conoce por ser estricto con las tarjetas amarillas, mostrando siete en la final de la Europa League que dirigió, y ha sacado solo 18 tarjetas rojas en casi 300 partidos entre el fútbol alemán y competencias europeas.
Fuera de las canchas, Zwayer está casado, tiene dos hijos y es socio de una empresa inmobiliaria. Su método de preparación para los partidos incluye el análisis de encuentros previos de los equipos y el estudio de las plantillas para conocer a todos los jugadores
