Argentina, ya clasificada al Mundial 2026, trabaja de cara a una nueva doble fecha de eliminatorias sudamericanas. Mañana visitará a Chile a las 22 y el martes será local de Colombia, a las 21, en Buenos Aires.
El plantel que conduce técnicamente Lionel Scaloni ayer abrió las puertas del predio de la AFA en Ezeiza para que la prensa viera una parte del entrenamiento.
La selección viene de ganarle 1-0 a Uruguay en Montevideo y de golear 4-0 a Brasil en el Monumental. Y en esos partidos no estuvo Lionel Messi, que sí estará en los partidos que se vienen.
El capitán, de 37 años, viene en buena forma futbolística en Inter Miami, su equipo en la MLS de la liga estadounidense.
Y es una de las buenas noticias en un panorama de bajas que habían preocupado a Scaloni.
Es que en Santiago no estarán cuatro suspendidos: el defensor Nicolás Otamendi y los volantes Leandro Paredes, Enzo Fernández y Nicolás González. También son baja los lesionados Lautaro Martínez (el delantero faltará al menos contra Chile) y Alexis Mac Allister (el volante no estará disponible en ambos cotejos).
En ese contexto, Scaloni y su cuerpo técnico vienen trabajando con una formación que sería la siguiente: Emiliano Martínez; Nahuel Molina, Cristian Romero, Leonardo Balerdi, Nicolás Tagliafico; Giuliano Simeone, Rodrigo De Paul, Exequiel Palacios y Thiago Almada o Nicolás Paz; Lionel Messi y Julián Álvarez.
En ese 11 estarán los cordobeses Molina, Romero y Álvarez. El otro cordobés de la lista es el defensor Mariano Troilo, jugador de Belgrano de 21 años, que vive “un sueño”.
El zaguero fue la sorpresa de la lista y su presencia se inscribe en el contexto de “medida renovación” que lidera Scaloni.
Otro joven en el plantel es la figura de River, el zurdo mediocampista Franco Mastantuono.
Otro es Paz, volante del Como de Italia, quien es alternativa para el equipo titular.
El recambio y lo que viene
En noviembre de 2024, el DT había hablado del tema. “Necesitamos que jueguen”, había avisado sobre los referentes del equipo y sus realidades en sus clubes. “Optamos mucho por seguir con la base que nos dio la alegría de la copa y no hubo tanto tiempo de traer a otros jugadores, pero a partir de ahora necesitamos que todos jueguen y a partir de ahí decidir por el nivel futbolístico de cada uno. Como siempre hemos hecho, salvo en esta ocasión”, agregó en aquella conferencia de prensa.
Argentina disfruta del proceso más exitoso de su historia, que incluye las Copa América de 2021 y de 2024, la Finalissima de 2022 y el Mundial en Qatar, en 2022.
Los números de Scaloni en el seleccionado son para la admiración global: 60 triunfos, 17 empates y ocho derrotas, con 172 goles a favor y apenas 46 en contra.
A esta altura del proceso, Scaloni pretende que su equipo siga siendo un equipo que no dependa de Lionel Messi, algo que parece estar afianzado y que se vio con contundencia en el 4-0 a Brasil de marzo.
Claro que no depender de Messi es difícil. Es el líder histórico y sigue siendo el jugador que más goles marcó en el ciclo, con 47. Además, sigue produciendo en Estados Unidos.
Si bien nadie lo dice ni quiere presionar “de más”, la forma física de Messi ilusiona con que pueda llegar al Mundial del año próximo, en el que cumpliría 39 en plena competencia.
Justamente ese torneo será diferente al del último Mundial, en Qatar. Es que esta vez participarán 48 selecciones, distribuidas en zonas de tres equipos cada una.
El certamen durará 40 días, por lo que los descansos serán más largos y eso habilita a gestionar mejor las recuperaciones de futbolistas como Messi.
Como sea, Argentina vive un presente tranquilo y mira al futuro sin urgencias. Lo que es ideal.
Las estadísticas de las eliminatorias sudamericanas