Tras la asamblea del jueves en el predio Lionel Messi de Ezeiza, la AFA ahora espera la respuesta del Gobierno nacional que imagina no se quedará de brazos cruzados.
La decisión de renovarle el mandato presidencial a Claudio “Chiqui” Tapia por cuatro años más, eliminar los descensos en Primera para que haya 30 equipos en Primera a partir de 2025 y cambiar el domicilio legal de la ciudad autónoma de Buenos Aires a la provincia de Buenos Aires en procura de mayor amabilidad política se tomó a pesar de fallos de la justicia civil y la Inspección General de Justicia que recomendaban no hacerlo.
Por eso, el próximo partido se habrá de jugar en los estrados de la Cámara de Apelaciones en lo Civil de la ciudad de Buenos Aires que deberá resolver el recurso que presentó Pablo Toviggino en su carácter de tesorero de la AFA y que permitió la realización de la asamblea al no haber dejado firme la decisión de la IGJ.
La Justicia puede convalidar todo lo resuelto ayer o bien impugnarlo total o parcialmente. Lo que verdaderamente parece estar puesto bajo la lupa es la reelección de Tapia con un año de anticipación en medio de su enfrentamiento con el gobierno nacional por la instauración de las sociedades anónimas deportivas y en particular, con Andrés Fassi, el presidente de Talleres.
También se pondrá el foco en cuestiones de forma y fondo del resto de las modificaciones estatutarias. Algunos conocedores del ámbito judicial anoche apuntaban que podría objetarse la supresión de los descensos, una situación que por ahora afecta a Tigre e Independiente Rivadavia de Mendoza, los dos equipos que están perdiendo la categoría en estos momentos.
Otros sostienen que como la organización y reglamentación de sus torneos es potestad de la AFA y está fuera del alcance de la Justicia, nada de eso sería dado de baja. Y que si aún fuera así, la quita de los descensos hasta podría salir por Comité Ejecutivo.
Javier Milei y su partido
Pero más allá de los tejes y manejes de los abogados, los dirigentes que se quedaron un rato largo en Ezeiza comentando la asamblea suponen que el presidente Javier Milei saldrá a decir lo suyo con su estilo impetuoso. Ayer por la mañana, en su muy activa cuenta de la red X, Milei compartió un dibujo del personaje Gaturro del dibujante Nik, en la que le preguntan “Chiqui… ¿AFA sí o AFA no?”, a lo que Tapia contesta: “Afano, siempre”. Otro personaje que aparece en la imagen es Gaturro, quien define al presidente de la AFA como “Cheque Tapia”.
¿Se animará Milei a intervenir a la casa mayor del fútbol? La sola posibilidad de decirlo hiela la sangre de todo el ambiente de la pelota. Porque daría los motivos de intromisión política para que Fifa desafilie a la Argentina en momentos en que la selección es campeona del mundo y bicampeona de América y tiene a Lionel Messi como máxima figura. De ser así, los equipos argentinos quedarían marginados de las copas continentales (River de la Libertadores y Racing y Lanús de la Sudamericana) y la selección tampoco podría seguir jugando las eliminatorias. Tanto Fifa como Conmebol tomaron partido por Tapia. Y nadie cree que Milei llegue a tanto. Pero ninguna respuesta se desprecia.
Es más: en una de las ruedas de dirigentes de ayer en Ezeiza, uno de los más cercanos a Tapia dijo que si en algún momento de la pelea, el Gobierno quisiera poner un hombre suyo al frente, la AFA pararía de inmediato todo el fútbol en todas las categorías.
A esa altura llega el conflicto que luego de la asamblea de ayer escaló a otro nivel de confrontación.
