Con la confirmación de Andrés Fassi a La Voz de que Nahuel Bustos retornará nuevamente a Talleres el próximo 3 de enero y que se ejecutará la cláusula de respesca para esta etapa del año que pactó con San Lorenzo, se abrirá en el plantel que dirige Alexander Medina una más que interesante puja por saber quién será el referente de área del equipo en la temporada 2025 de cuádruple competencia para el Albiazul.
El cuarto retorno de Nahuel a la “T”, y esta vez de la mano del “Cacique” Medina, sin dudas el DT que más lo potenció y quien le pidió a Fassi su retorno para tratar de recuperarlo y ponerlo al nivel de sus mejores antecedentes, lo encontrará compitiendo por el puesto con Cristian Tarragona, Federico Girotti –quien probablemente sea salida del plantel en este mercado de pases-, Bruno Barticciotto, David Romero (“el Rulo” volvería a ser prestado), y de otro delantero que Fassi está buscando en el exterior, y más precisamente en la MLS (¿será Franco Fragapane?)
Claro que, antes, habrá que esperar para saber si Medina se inclinará en la próxima temporada por jugar con un referente de área puro, como “Fede” –de tranco largo, muy buen cabezazo y potente en lo físico-, o si optará por delanteros que puedan moverse por todo el frente de ataque y con más movilidad, como “Tarra”, “Barti” o “NB10″.
El goleador del equipo en esta temporada 2024 fue Barticciotto, con siete tantos, en su mayoría jugando de extremo, pero no es un secreto que él se siente más cómodo jugando de “9″, posición en la que se destacó en la Universidad Católica y Palestino de Chile.
Tarragona, en tanto, quien señaló cuatro goles durante la temporada, fue empleado indistintamente por Medina como extremo y centrodelantero, por las características propias de su juego.
Como “Barti”, trabaja bien las diagonales, engancha hacia adentro cuando le toca ir por las bandas y tiene buen cabezazo, pero está claro que lo suyo es presionar a los defensores rivales, aguantar, pivotear y finalizar las jugadas en el área rival.
Bustos, de recuperar su nivel, le puede ofrecer al equipo distintas soluciones, por su capacidad para definir, pivotear, abrir espacios y crear juego, algo que no siempre se encuentra en un delantero. De hecho, con “el Cacique”, Nahuel llegó a jugar también de media punta.
Alexander Medina fue delantero y de los picantes. Tiene ojo clínico para estudiarlos, explotarlos y descubrir nuevas aristas en su juego, tal como sucedió con Diego Valoyes, a quien supo potenciar en la “T” como nadie cuando el colombiano tenía un pie y medio afuera del club. Lo mejor que le puede pasar es tener disponibilidad para trabajar y elegir. A su juego lo llamaron.
