En la previa de la próxima doble fecha Fifa, Marcelo Bielsa sorprendió con una dura autocrítica sobre su trabajo al frente de la selección de Uruguay. El técnico argentino reconoció que no logró alcanzar el nivel esperado y, aunque asumió responsabilidades, también envió un fuerte mensaje interno a su plantel para resolver las diferencias dentro del vestuario.
Durante su conferencia de prensa, el rosarino fue categórico al evaluar lo hecho hasta ahora: “Soy consciente que mi gestión, cuyo objetivo es potenciar el material humano que manejo, es un objetivo no cumplido“. Según explicó, la Celeste debería estar en un peldaño más alto: “Deberíamos estar peleando detrás de Argentina, pero hoy no alcanzamos ni el nivel mostrado por Ecuador”.
Uno de los puntos en los que hizo hincapié fue la falta de eficacia ofensiva. “No di en la tecla para mejorar el ataque del equipo. Me equivoqué en el diagnóstico“, admitió, reconociendo que varias de las soluciones que intentó implementar no dieron los resultados esperados.
A pesar de la mirada crítica, Bielsa valoró la victoria ante Venezuela por 2-0 y destacó lo positivo que dejó ese encuentro: “Hicimos un gran partido y es muy importante que hayamos construido una actuación que valoramos mucho“.
En su exposición, también dejó en claro que proyecta continuar al mando de la Celeste rumbo al Mundial, adelantando que “ya tiene definidos casi todos los nombres de su lista de 23 jugadores”.
Por último, el DT tocó un tema sensible: las tensiones internas luego de los dichos de Luis Suárez y los gestos de malestar de algunos futbolistas. Con un mensaje directo al vestuario, señaló: “Yo les pido a los jugadores que si me equivoqué, que me lo hagan saber puertas adentro y no de manera pública“. Y remarcó: “Las cosas que tenemos para decirnos debemos hacerlo puertas adentro“.
