El plantel celeste no trabajará durante el fin de semana y retomará la actividad el lunes, con la mira puesta en el compromiso del próximo fin de semana (sería viernes o sábado) ante Tigre, por la fecha 14 del Torneo Clausura de la Liga Profesional de Fútbol.
El duelo con el Matador es clave, porque representa para Belgrano la posibilidad de activar otro sueño: estar en zona de definición del certamen. Para ello, debe mantenerse entre los ocho equipos del grupo que disputan los playoffs, posición en la que hoy se encuentra. Pero para sostenerla, necesita sumar de a tres ante Tigre.
El partido con el “Bicho” de La Paternal fue un golpe al corazón de la gente, a la ilusión del hincha y de los jugadores, quienes vieron escaparse de cerca la posibilidad de una vuelta olímpica que varios de ellos soñaban con alcanzar.
El trabajo del técnico Ricardo Zielinski será sacar a los jugadores del mal momento y llevarlos al terreno de la recta final del torneo, con la cabeza puesta en los tres partidos que restan (Tigre, Argentinos Juniors y Unión). Son los que reactivarán la chance de pelear por objetivos importantes, ya que no habrá más oportunidades en lo que queda del año para mejorar la imagen de una campaña que rozó lo muy flojo.
El Pirata llega a esta recta final golpeado en lo anímico, pero con la certeza de que depende de sí mismo para conseguir el pase a la fase de definición del torneo.
Se vienen días de definición en el futuro inmediato del club, que buscará colocar su nombre en los playoffs como primer objetivo deportivo. Luego comenzará a trabajar en la “purificación” del plantel, con varias bajas y algunas altas.
Caras extrañas
Un Zielinski enojado, pidiendo que se haga algo respecto a lo que ocurre en el campo con los árbitros; un Zelarayán disculpándose con la gente; un “Licha” López muy fastidiado por el rendimiento del equipo; y los hinchas decepcionados fueron las imágenes extrañas que dejó la Copa Argentina para el Pirata. La “B” no había necesitado ni una definición por penales para llegar hasta donde llegó, pero se topó con un equipo que jugó mejor, con un árbitro permisivo y con muchas falencias individuales que conspiraron contra su chance de seguir en carrera.
Ahora es momento de mejorar: de que la puesta a punto física de los lesionados se realice de manera más eficaz, de que lo futbolístico se retoque para minimizar errores en el campo y de que el rendimiento del equipo se ajuste en el Clausura para buscar un puesto de definición.
Se está ante la última oportunidad que ofrece el torneo: meterse en la pelea. La ilusión no puede perderse del todo. Es momento de volver a soñar con que la AFA tenga un ataque de honestidad en la recta final de la competencia y que el “efecto Platense” pueda repetirse para lograr cosas importantes.
Completa la Reserva
Este sábado, a las 10.30, en el predio de Boca, la Reserva de Belgrano completará los 52 minutos pendientes del partido que se suspendió por el fallecimiento de Miguel Ángel Russo. La “B” está ganando 2 a 1 y, de sostenerse el resultado, regresará a la cima de la Zona A, que hoy lidera el Xeneize con un punto de ventaja sobre el Pirata.
