El momento llegó. Tras una interminable espera que le demandó 39 días, San Isidro de San Francisco comenzará a desandar el camino al ascenso a la Liga Nacional de Basquetbol. El martes inicia la serie final de la Liga Argentina ante Racing de Chivilcoy, quien cuenta con ventaja de campo para un eventual quinto y decisivo juego.
La temporada 2024/2025 llega a su cierre con dos particularidades que se repiten en relación a la temporada anterior: otra vez un equipo cordobés afrontará los playoffs por el ascenso a la Liga Nacional y nuevamente el rival que tendrá enfrente será Racing de Chivilcoy.
En la temporada 2023/2024, Atenas gritó campeón y logró el ascenso a la elite, en una durísima serie que definió a su favor 3-2 en Córdoba. Esta vez, será San Isidro de San Francisco, campeón del torneo Apertura, quien intentará dar el salto a la Liga Nacional. Una instancia a la cual regresa seis años después, luego que en 2019 disputó, sin éxito, la final por el ascenso frente a Platense.
El dilema que acompaña esta serie final será si prevalece un equipo descansado y sin los embates de la competencia como es San Isidro o quien llega “aceitado” y con ritmo de competencia como lo es Racing. Esto es así pues los Halcones volverán a jugar oficialmente luego de un parate de 39 días; mientras que la Academia volverán a tener acción ocho días después de su último compromiso.
Los cordobeses, que se ganaron el derecho a disputar la final por el ascenso tras coronarse campeones del Torneo Apertura, llegaron hasta las seminales de la Conferencia Norte del Clausura, donde sucumbieron ante Sportivo Suardi (0-3), precisamente ante el mismo rival al que Racing venció en la final del Clausura, también por un categórico 3-0, que le permitió salir campeón y lograr la oportunidad de jugar la final por el ascenso.
Los sanfrancisqueños, que tendrán desventaja de campo, viajarán el domingo a tierras bonaerenses para concentrar el lunes en Chivilcoy, donde en el “Grilon Arena” afrontarán los dos primeros juegos de la serie: el martes y el jueves, ambos a las 21. Luego la serie se trasladará al “Antonio Manno” de San Francisco el lunes 2 (a las 21). En caso de ser necesario un tercer juego, también será en San Francisco el miércoles 4 (21) y, en caso de ser necesario un quinto, se trasladará a Buenos Aires para el sábado 7 (21).

La Academia bonaerense alcanzó el título del Clausura luego de dejar en el camino a Pergamino Básquet en cuartos (3-1), Deportivo Viedma en semis (3-0) y a Lanús en la Final de la Conferencia Sur (3-1). Mientras que en la final Interconferencias le ganó a Suardi 3-0.
Cómo lo vive su entrenador
El sunchalense Sebastián Porta, ex jugador y actual director técnico del “Sani”, quien se hizo cargo del equipo en la temporada que está por finalizar tras ocupar el cargo vacante dejado por el ahora director deportivo Daniel Beltramo, viene “deshojando la margarita” para afrontar la instancia final. Y en la recta final de la preparación deja sus impresiones de lo que se viene para su equipo.
-¿Cómo llega el equipo al playoffs por el ascenso?
-Llegamos con muchos anhelos, muchas ilusiones y muchos sueños. Y con energías positivas. Ahora todo lo tendremos que transformar en intensidad y en beneficio del equipo. Estamos en un lugar de privilegio, donde para los 32 equipos de la categoría sólo había lugar para dos en esta instancia. Por suerte nosotros somos uno de ellos. Y personalmente estoy muy feliz. Disfrutando el día a día y este final de temporada. Obviamente que trataré que sea de la mejor manera posible para cerrarlo como queremos.
-¿Por dónde creés que pasará la serie?
-La serie será muy física y muy táctica. Habrá que resolver detalles, habrá que estar muy atentos a las distintas situaciones que se plantearán. Por eso deberemos mantener la concentración para seguir el plan de juego. Nos enfrentamos a un gran rival que viene haciendo un proceso desde hace años. Por eso será una gran final, con dos grandes equipos, con la particularidad que arrancamos de visitantes. Entonces, necesitamos arrancar muy metidos para ver si conseguimos algún juego de visitante y así poder revertir la localía.
-¿Cuáles son las expectativas?
-Son altísimas, las mayores. Las cartas ya están jugadas. Después de tanto tiempo de espera conocimos a nuestro rival. A nosotros, el hecho de haber llegado a la final nos dio el cincuenta por ciento de posibilidad de lograr el ascenso e iremos por la otra mitad.
-El haber estado 39 días sin competencia oficial, favorece y perjudica. En cada caso, ¿Por qué?
-Creo que tanto desde lo mental como de lo físico nos favorece. En el Clausura estábamos haciendo un gasto de energías muy grande, con un equipo diezmado. Nos daba la impresión de que, si seguíamos avanzando en el playoffs, nos terminaría siendo perjudicial. Aunque para nadie es lindo perder, quedar afuera nos permitió recargar las pilas, los jugadores pudieron descansar, se pudo recuperar a los lesionados cosa de llegar de la mejor manera a la final, tanto de lo físico como de lo mental. Lo perjudicial sería no saber cuál es la realidad concreta que tiene hoy el equipo porque no hemos tenido competencia, más allá de los amistosos, que no son lo mismo. Pero estoy convencido de que en el momento que empiece la final todas esas cosas quedan de lado y hay que disputarlas con el corazón, con la cabeza fría, con mucha intensidad y energía, que descarto será así. De esa manera esas falencias que podríamos tener por el parate largo se podrán suplir con todo eso.
Un rival muy cordobés
Dando muestras de lo profuso que es la provincia de Córdoba en la provisión de jugadores de básquet a distintos clubes del país, Racing de Chivilcoy presentará en el plantel de la final a cuatro cordobeses, dos de los cuales supieron formar parte de San Isidro. Se trata del alero riotercerense Santiago Assum y el ala pivote sanfrancisqueño José Peralta.
Además forman parte del plantel conducido por Diego D’Ambrosio el alero juvenil José Allub y el base y escolta oriundo de Río Tercero, Lucio Reinaudi.
Precisamente el ex jugador con anterior paso por Bologna Basket de Italia y quien se sumó como refuerzo a Racing en la actual temporada, también le contó a La Voz cómo llegan a la final por el ascenso.
-Cómo llega Racing al playoffs?
- Llegamos bien. Estamos fuertes, estamos sólidos. Encontramos nuestra mejor versión en los playoffs y eso se nota muchísimo, tanto en los resultados como en el volumen de juego del equipo. Y todavía creo que podemos seguir mejorando y eso nos motiva. Asique, por ese lado, creo que llegamos muy bien, con mucha energía. Estamos enteros en todas las posiciones y con todos los jugadores.
-¿Por dónde creés que pasará la serie?
-Trataremos de imponer nuestra identidad de juego, que pase por nuestra parte defensiva, que es clave para nosotros por lo que estamos haciendo en defensa. Y, después, poder imponer nuestro ataque a partir de nuestro estilo y de la dinámica del juego colectivo que estamos teniendo. Estamos teniendo poder en ambos costados, tenemos que aprovecharlos y seguir haciéndolo lo mejor que se pueda, tal como lo venimos haciendo. Y después estar tranquilos. Será una final, en los que habrá momentos para todo, incluso dentro de los mismos partidos, donde habrá momentos para nosotros y otros para ellos. Por eso habrá que estar fríos y tranquilos.
-A quién y por qué creés que beneficia o perjudica el estar tanto tiempo sin jugar, como San Isidro, o estar en competencia, como es Racing?
-A nosotros, como estamos hoy, que estamos bien, nos beneficia. Llegar al momento que llegamos con la competencia que hemos tenido en estos playoffs, donde ganamos con nuestra impronta e identidad te da confianza y más en estos momentos decisivos en los que se juega al límite. Hasta ahora hemos sabido superar esas instancias, donde fuimos encontrando la mejor versión cada vez que fuimos avanzando. También tenemos una semana de descanso por lo que creo que llegaremos bien físicamente. Todo eso nos beneficia. Ahora no sabemos si a San Isidro lo perjudica o no el hecho de no haber jugado por tanto tiempo. Será una situación nueva para los dos. Enfrentar a un rival que lleva más de un mes sin jugar es una incertidumbre para todos. Nadie sabe cómo será. Es una experiencia nueva debido al formato del torneo.
-Sos uno de los cordobeses que tiene el plantel ¿Lo vivís y lo viven de alguna manera especial?
- Si, es verdad, soy uno de los cordobeses del equipo. Creo que está bueno. Nos motiva mucho que sea San Isidro el rival de la final porque es de Córdoba y más que nada porque es una institución que hace mucho tiempo está peleando arriba en la Liga Argentina. Que siempre hace las cosas bien, que siempre apuesta por estar donde está, al igual que Racing, y eso te entusiasma. Sabés que vas a jugar contra una estructura que está formada, contra un equipo que se armó para estar donde está, con toda una ciudad detrás que corre por el mismo sueño de nosotros. Eso entusiasma, uno conoce todo lo que es ‘el mundo’ de San Isidro, por haberlo enfrentado muchas veces y porque tengo compañeros que han pasado por ese club.