Continúa el escándalo que involucra al basquetbolista argentino Luca Vildoza y a su esposa, la jugadora serbia de vóley Milica Tasic, quienes fueron detenidos y luego liberados tras ser acusados de agredir a una enfermera en plena vía pública en Bologna, Italia. Horas después de conocerse la noticia, Tiziana D’Antonio, la profesional de la salud y denunciante, dio su versión de lo ocurrido.
La reconstrucción del hecho
El episodio tuvo lugar la noche del 15 de octubre, poco después de la victoria del Virtus Bologna sobre Monaco por la Euroliga de básquet, en el estadio PalaDozza. Según informó La Gazzetta dello Sport, Vildoza y Tasic circulaban en un automóvil por la calle Calori, en las inmediaciones del estadio, cuando se toparon con una ambulancia de la Cruz Roja Italiana que estaba detenida mientras introducía una dirección en su GPS.
El jugador argentino habría reaccionado con gestos y palabras hacia el equipo médico y, minutos más tarde, en la avenida Silvani, habría obstaculizado el paso del vehículo sanitario con maniobras bruscas y frenadas.
El enfrentamiento escaló cuando ambos vehículos se detuvieron. De acuerdo con el mismo medio, Vildoza habría sujetado por el cuello a una enfermera, mientras que Tasic habría intervenido tirándole del cabello. El hecho ocurrió cerca de las 23:30 y fue presenciado por una patrulla de los carabineros, que intervino junto a directivos del club y la policía.
El relato de la víctima: “Entré en pánico, tuve miedo”
En diálogo con La Repubblica de Bologna, la enfermera Tiziana D’Antonio, de 55 años, contó su experiencia y el impacto que le provocó el episodio.
“Soy voluntaria de la Cruz Roja desde hace 22 años, soy instructora de reanimación, pero después de lo que ocurrió el miércoles por la noche no sé si volveré a subir a una ambulancia. Cuando me agarraron por el cuello, entré en pánico, tuve miedo y todavía me cuesta hablar de ello”, relató.
La mujer fue atendida en un hospital y recibió el alta pocas horas después, con un diagnóstico de cinco días de pronóstico. Tanto ella como otro voluntario de la Cruz Roja presentaron una denuncia por lesiones, mientras que Vildoza y Tasic pasaron la noche en la comisaría, enfrentando cargos por agresión a personal sanitario.
D’Antonio reconstruyó paso a paso cómo comenzó la discusión.
“Soy la jefa del equipo de rescate de la ambulancia que estaba de servicio desde las 19:45. Pasamos por delante del Palacio de los Deportes después del final del partido de básquetbol y nos acababan de asignar un código amarillo. Detuvimos el vehículo en la calle Calori, con las cuatro luces encendidas, porque ni yo ni el conductor de la ambulancia sabíamos dónde estaba la calle a la que teníamos que llegar. En ese momento oímos la bocina y vimos un Mercedes negro que quería pasar, como finalmente hizo. El conductor nos hizo un gesto obsceno con el dedo”, describió.
Luego, continuó con los detalles del recorrido que terminó en el enfrentamiento: “Arrancamos porque habíamos encontrado las indicaciones que buscábamos, con las sirenas y las luces intermitentes. El Mercedes, que en ese momento estaba delante de nosotros, se movía de derecha a izquierda frenando nuestro avance. Incluso, corrimos el riesgo de chocar por detrás. En el semáforo de la avenida, nos adelantamos, pero él (Vildoza) aceleró, y el conductor (de la ambulancia) me dijo: ‘No podemos seguir así, vamos a terminar teniendo un accidente’. Entonces le respondí: ‘Detente un momento, le explicaré qué se trata de una emergencia’”.
El testimonio
La enfermera también describió cómo fue el momento exacto de la agresión:
“Me acerqué a la ventanilla, él (Vildoza) bajó la ventanilla y empezó a hacerme señas con la mano para que miráramos el celular. Él hablaba en español y la chica que estaba con él, en inglés. Le dije en un inglés precario: ‘We are on emergency’ (Tenemos una emergencia). En ese momento, salió del coche. Cuando abrió la puerta, me agarró por el cuello, me levantó del suelo, yo empecé a gritar. La mujer alta y rubia que estaba con él también se bajó del coche y me tiró del pelo, yo llevaba un rodete y me arqueé hacia atrás. Los demás voluntarios que estaban conmigo lo vieron todo, intervinieron, conseguimos calmarlos y, mientras tanto, mis compañeros pidieron la intervención de la policía. Yo, por mi parte, vi pasar un patrullero y los detuve”, narró.
Finalmente, la víctima cerró su testimonio con una reflexión sobre lo ocurrido:
“Me encontré en una situación que ni en mis peores pesadillas habría imaginado. No conocía a este deportista. Después me dijeron que gana 4 millones de euros. Yo gano 25.000 euros al año, soy voluntaria, actué con conocimiento de causa y no voy a dejar que me arruinen la vida por un incidente en el que yo soy la víctima. Creo en los valores de la Cruz Roja y me parece que se ha perdido el sentido de la civilización”.
Investigación en curso
El caso sigue bajo investigación judicial, con una audiencia técnica prevista para los próximos días que buscará verificar la legalidad del arresto. Tanto Vildoza como Tasic permanecen en libertad, tras la revocación de la medida inicial.
A pesar de la polémica, el basquetbolista argentino participó del triunfo del Virtus Bologna (90-83) ante Lyon-Villeurbanne por la Euroliga, en medio de un clima de tensión que promete seguir dando que hablar en Italia.