El periodista Juan Daniel Cisneros fue distinguido este jueves en la Legislatura de Córdoba por su trayectoria y compromiso como comunicador, ya que es uno de los máximos referentes dentro del periodismo deportivo y del básquet, por una iniciativa elevada por el legislador provincial Rodrigo Rufeil.

Cisneros, tras dejar la actividad como jugador, continuó ligado al básquet como comunicador y se transformó en una gran referencia desde ese lugar en Córdoba, en Argentina y en el mundo. “Canasta” es un término que utilizó cuando relató el Mundial 1990 y que se transformó en el disparador para darle nombre al programa de televisión que llevó ese nombre durante más de 30 años. Canasta acompañó a Atenas, al básquet de Córdoba y al básquet argentino con coberturas en los principales eventos de este deporte en distintas partes del mundo.
Del acto realizado en la Sala de la planta baja de la Unicameral participaron familiares y amistades de Cisneros y personalidades del básquet, como Rubén Magnano, Medardo Ligorria, Gustavo Miravet, Germán Baralle y Javier Guiguet, entre otros. Además de Rufeil, el arco político estuvo representado por Miguel Siciliano, Facundo Torres y los hermanos Ramón y Diego Mestre, entre otros.

El evento contó con momentos muy emotivos matizados con otros en los que las anécdotas y los recuerdos despertaron las risas de todos los presentes.
Además de las palabras de reconocimiento vertidas por los anfitriones, Magnano fue invitado a pasar a escena. El DT campeón olímpico con Argentina en Atenas 2004, entre otros conceptos, destacó: “Personas hay muchas; gente, poca. Y vos, Juan, sos buena gente”.

A continuación, el texto del periodista Jorge Luna Arrieta que fue parte de la distinción entregada por la Legislatura de Córdoba.
El texto homenaje a Juan Cisneros
“Juan Daniel Cisneros, el hombre que más sabe de básquet. El slogan creado por Jorge “Galleta” Kelly es la definición perfecta para la persona que es sinónimo de básquet en Córdoba. Es que Juan entendió a este deporte desde todos los lugares: como jugador, como entrenador, como periodista, como docente, como consejero. Juan fue desde siempre fuente de consulta para jugadores, para entrenadores, para dirigentes, por saber y por ser. Y más allá del deporte.
A los 8 años, en su amado club Universitario, encontró la razón de su vida. Fue amor a primera vista con la naranja y el aro. Con solo 15 años debutó en la primera de la “U” y sus logros dentro de la cancha incluyen la obtención del campeonato intercolegial de Sudamérica, con 17 años, y la conquista de dos campeonatos en la Asociaciòn Cordobesa, consolidando su reputación como un jugador de alto nivel. Además, representó a la selección de Córdoba en dos Campeonatos Argentino de Mayores.
La transición de Cisneros al periodismo deportivo fue una evolución natural, impulsada por su deseo de compartir su pasión con una audiencia a la que logró llegar y hacer crecer con el paso de los años. Su rol para potenciar la popularidad de este deporte fue clave. Su prolífica carrera en los medios registra pasos por Radio Universidad, Cadena 3, La Voz del Interior y los canales 8, 10, 12, ATC y Showsport, entre otros. Su trabajo en diversas plataformas le permitió compartir su vasto conocimiento del deporte. Como periodista deportivo, cubrió innumerables torneos y campeonatos significativos, incluyendo cinco Juegos Olímpicos, diez Copas del Mundo, cuatro Finales de la NBA y cinco Final Four de la Euroliga, demostrando su impacto y dedicación al deporte. Su profundo conocimiento del juego le permitió ofrecer análisis y contenidos en eventos de alto perfil, ganándose el reconocimiento como una voz líder en el periodismo.
Pero el legado de Juan Daniel Cisneros trasciende la cancha y los micrófonos. Durante casi 50 años, impartió clases de básquetbol en la Universidad Nacional de Córdoba y en el Instituto Manuel Belgrano. Su rol como docente y formador es innegable, dejando una marca imborrable en generaciones de basquetbolistas, entrenadores y periodistas.
Claro que un momento emblemático en su carrera fue la creación del término “canasta”, un grito gutural de victoria que surgió de su corazón al relatar los partidos del Mundial 1990 para ATC. Canasta es una verdadera marca registrada en el corazón de los cordobeses. Este término trascendió su origen y se transformó en el nombre del emblemático programa de televisión que se convirtió en uno de los ciclos más importantes de Córdoba. Este espacio no solo informó y educó sobre el básquet, sino que también entretuvo, cumpliendo cabalmente con el rol de un medio de comunicación: informar, educar y entretener. La generosidad de Juan se manifestó también al abrir las puertas de su programa a numerosos colegas de distintas generaciones, brindándoles la oportunidad de trabajar, de mostrar su talento y de aprender a partir de sus consejos y de su vasta experiencia.
Juan es el periodista que acompañó los grandes momentos del deporte argentino, fundamentalmente los de Córdoba. Fue un testigo privilegiado del nacimiento de grandes glorias del básquet cordobés y argentino, tanto dentro como fuera de la cancha, convirtiendo a todos los cordobeses en testigos privilegiados a través de sus relatos sobre Atenas, la selección argentina y la Generación Dorada. Su trayectoria como jugador, entrenador, docente, formador y periodista deja una huella imborrable. Como comunicador, Juan ha tenido la enorme virtud de saber transmitirnos ese amor por el básquet y de contarnos y explicarnos el valor de una disciplina que es una de las mejores expresiones del trabajo en equipo. Y de hacerlo de una manera simple para volver sencillo a un deporte complejo y profundo.
La coincidencia de que “Canasta” y “Córdoba” tengan siete letras son un guiño a la profunda conexión entre Juan Daniel Cisneros y la pasión cordobesa por el básquet. Es una muestra de cómo la fortuna y el destino suelen combinarse con una sabiduría extraordinaria. Su legado perdurará como inspiración para futuras generaciones de atletas y periodistas, demostrando el valor de la pasión, la dedicación y el trabajo arduo en la búsqueda del éxito. Por Nené, por Matías, por Agostina, por los nietos, por la familia, por los amigos, por Córdoba. Juan no es solo una figura en la historia de nuestro básquet; es una parte fundamental de su identidad. Y no hay mayor justicia que Córdoba, orgullosa de sus hijos pródigos, reconozca a uno de ellos: Juan Daniel Cisneros".





