Instituto pondrá todo el martes, en Alta Córdoba, en el sexto partido de la final de la Liga Nacional de Básquetbol para igualar la serie. El sábado perdió ajustadamente 84-85, quedó 2-3 abajo, y en el Sandrín buscará la victoria para forzar al séptimo y último encuentro de la final, programado para el 20 de julio en la Bombonerita.
“Confiamos en este grupo, en cada uno y creo que tenemos que seguir por la misma línea, buscando los detalles por dónde atacar, pero sin dejar de lado la defensa”, indicó a La Voz Nicolás Copello, quien colaboró con 15 puntos en la caída en la pelota final.
“Creo que ellos tuvieron una efectividad con tiro fortuitos algunos, otros sí, tiros solos, pero debemos buscar que no se sienta cómodo porque se nota que fluyen de la misma manera, tenemos que ir por ese lado”, aseguró el escolta santafesino, mientras se veía el hielo en su hombro derecho, golpeado en el tercer partido.
-¿Están fuertes para el sexto partido?
-Sí. Vamos a estar fuertes, somos un grupo así y seguiremos hasta donde sea de esta manera que creo que contagia a la gente. La gente nos contagia a nosotros. Por eso te llena orgullo dejarlo todo. Vamos por por ese camino siempre. Este equipo lo va a dar todo. Puede que ser que estemos 10 abajo, por 20, pero siempre vamos a pelear, esté quien esté en cancha. El contagio es innato, de cualquiera y eso es lo que nos pone orgulloso. Hay que seguir, hay que estar listos para el martes y seguir por la línea que vinimos.
-Es muy rescatable cómo vuelve el equipo a los partidos. Parecía que lo definía Boca y estuvieron ahí
-Sí. Es un poco lo que caracteriza el equipo. Es cuestión de ganas, de sacrificio, siempre lo demostró con bajas, sin bajas. El equipo se sobrepuso y estamos acostumbrados. Obviamente se pueden jugar mejores o peores partidos, pero el equipo no te va a dejar nunca. Eso es un orgullo. Tenemos que ajustar detalles y saber de qué estamos muy cerca.
-Es rescatable el compromiso de Instituto como lo muestran los jugadores lesionados y salen a jugar igual, como vos
-Es lógico porque sabemos lo que estamos jugando, es recatable de todos dar un plus y sabiendo de que después hay descanso. Lo hablaba, no me acuerdo con quién, y le decía que el dolor es pasajero, pero que la gloria es eterna. Me parece que estamos buscando eso todos, nos toque los minutos que nos toquen, las jugadas, lo que sea.
-¿Están arriesgando el físico, es su carrera?
-Si, pero el físico se arriesga en base a los estudios médicos y uno sabiendo que después hay tiempo de recuperación. Lo hablaba con Martín Cuello, que tiene lo mismo que yo en el hombro y me dice “Te va a doler por un tiempo” y no pasa nada. Esto es hoy, en el futuro no sé qué va a pasar. Entonces quiero enfocarme en esto, dar todo lo que pueda, como Nico (Pomoli) también lo hace, como lo hace Lee (Aaliya), como lo hace Lean (Vildoza), como lo hacemos todo, estemos o no tocados. Entonces, cuando ves que uno lo hace y que por ahí está peor que vos, lo tengo que hacer también.
-¿Te tocó tener protagonismo, eficacia en los triples, como para darte confianza?
-Ya me sentí mejor el otro día, en el cuarto partido, más allá de que fueron pocos minutos. En este quinto juego también, me parece que parte todo desde, entre comillas, el buen humor ofensivo parte desde una buena defensa que nos permita correr, de que aparezcan los tiros más allá de que pueden entrar o no. Eso nos deja cómodo, contentos de que son buenos. Entonces, me parece que estamos estamos yendo por ese lado y hay que seguir.
-Te vi cuando te sacan de la cancha en la última jugada, estaban un poco enojado con el segundo asistente, y después resolvieron todo con un abrazo ¿Cómo fue?
-Me habían mandado un reel que era medio parecido, que se estaban peleando en la calle y lo resuelves así. Son situaciones de partido. Asumí mi culpa en ese caso por una cuestión entre nosotros y listo. Trato de que de que no quede en la retina ni en la cabeza y que se limpie rápido, porque todos somos importantes.
