Harina de uva, premezclas elaboradas con harinas alternativas, garbanzos cubiertos con chocolate, pasta de maní, frutos secos, granolas. En Córdoba están pasando cosas que a veces sólo se descubren en ferias de productores como Caminos y Sabores, desarrollada el mes pasado en La Rural de Palermo.
Lorena Londero descubrió la harina de uva con un proceso muy personal: fue diagnosticada con esclerosis múltiple, y a partir de ese momento comenzó a investigar cómo podía mejorar su salud a través de la alimentación.
“En ese camino, descubrí el poder de las semillas de uva y sus beneficios antiinflamatorios. Así nació mi deseo de transformar ese hallazgo en un producto que también pudiera ayudar a otros”, arranca Lorena.
La harina de uva es un alimento funcional elaborado a partir del secado y molienda de las pieles y semillas de la uva. Es rica en antioxidantes naturales como el resveratrol, la fibra, los omegas, las vitaminas y los minerales.
–¿Cómo se dio la oportunidad de empezar a producirla?
–Fue una combinación entre necesidad personal, conocimiento ancestral y el deseo de generar impacto positivo. Vivir en Colonia Caroya, una ciudad con fuerte tradición vitivinícola, me permitió acceder a materia prima que hasta entonces era desechada. Vi allí la posibilidad de darle una nueva vida a un residuo creando un alimento nutritivo, sin gluten, sin octógonos, y alineado con los principios de la economía circular. Con esa visión, nació Resiliencias, un emprendimiento de triple impacto que une salud, ambiente y desarrollo local.

–¿Cómo se usa el producto en gastronomía?
–La harina de uva es muy versátil en la cocina. Se puede usar en panificados, pastas, budines, galletas, panqueques, batidos, barritas, rellenos, empanados, y más. Tiene un sabor intenso y ligeramente afrutado, que aporta un toque distintivo. Además, mejora el perfil nutricional de cualquier preparación, aportando fibra y proteínas sin alterar significativamente la textura. Es ideal para quienes buscan alimentos funcionales, reales, sin gluten y con mayor valor agregado.
–¿Por qué decimos que es saludable?
–Los compuestos tienen efectos demostrados en la reducción de la inflamación, en el fortalecimiento del sistema inmune, en la mejora de la circulación y en la protección celular contra el envejecimiento prematuro. Además, al ser sin gluten, sin azúcares agregados ni aditivos, la harina de uva es apta para personas con celiaquía, con diabetes o para los que buscan una alimentación más consciente y natural. También puede ayudar a regular la glucemia y mejorar la microbiota intestinal.
–¿En qué situación está Resiliencias y cuáles son sus proyectos a futuro?
–Está en etapa de crecimiento. Hemos logrado posicionar nuestro producto en ferias, en puntos de venta saludables y en plataformas digitales. Participamos en concursos de innovación, en premios de sustentabilidad y en programas que impulsan el desarrollo emprendedor. A futuro, queremos ampliar la capacidad de producción, sumar nuevos productos, llegar a más provincias y explorar mercados internacionales. También aspiramos a crear alianzas con instituciones científicas para seguir investigando los beneficios del producto.
Garbanzos con chocolate
Vegetanesa crea y comercializa productos hechos a base de vegetales y legumbres: aderezos y snacks. Todos los productos son libres de gluten. Por un lado, aderezos untables a base de diferentes verduras y legumbres, entre ellas zanahoria, remolacha, berenjena, garbanzo, poroto negro. También hummus de garbanzo y babaganush ahumado.

“Por otra parte, agregamos valor y creatividad al garbanzo, dando lugar a la elaboración de snacks salados crujientes, ricos y nutritivos, una forma diferente y deliciosa de incorporar el consumo de garbanzos. También hacemos cubiertos con chocolate para la hora del postre”, dice Paula Fraticelli.
–¿Cómo se dio la oportunidad de empezar a producir?
–Desde el año 2004, estamos en el mundo de la creación de productos alimenticios. En 2015, nació Vegetanesa como marca y como unidad de negocio abocada a agregar valor a verduras y legumbres que se cultivan en nuestro territorio. Siempre con la premisa de generar productos creativos, ricos, atractivos y nutritivos. Uno de los socios de la empresa es el creador de cada uno de los productos de la marca, Federico. Él piensa y diseña cada fórmula hasta dar con el producto que consideramos ideal para ofrecer en el mercado.
–¿Para qué sirven los productos en gastronomía?
–Todos los aderezos son ideales para acompañar preparaciones varias: sándwiches, picadas, bruschettas, carnes, fajitas, ensaladas, inclusive pastas. Y los snacks son ideales para picotear algo rico y salado, se agregan como ingrediente crunchy a ensaladas y pastas y se amoldan perfectamente como ingrediente de picadas.
–¿Por qué hablamos de un producto saludable? ¿Cuáles son sus beneficios?
–Todos los productos están hechos a base de vegetales y son sin gluten. En el caso de los aderezos, la base de cada uno de ellos es la verdura o legumbre que su nombre indica. Por ejemplo, el babaganush está hecho 100 por ciento a base de berenjena y se agregan otros ingredientes para lograr untuosidad y su sabor diferencial. Lo mismo ocurre con el aderezo de zanahoria, la base es la hortaliza, acompañada de otros ingredientes que aportan textura y sabor. En cuanto a los snacks, son garbanzos. Es decir, es la legumbre sometida a cocción y con un toque de sabor. Una forma diferente y riquísima de incorporar la legumbre y sus nutrientes a la alimentación.
–¿En qué situación está Vegetanesa y cuáles son sus proyectos a futuro?
–Estamos en crecimiento, expandiendo nuestra presencia en Córdoba y en otras provincias argentinas, como Buenos Aires, Santa Fe, San Luis y Entre Ríos. Recientemente, los productos Vegetanesa llegaron a las góndolas de una cadena de supermercados cordobesa y trabajamos para incorporar nuestros productos a otras cadenas. Además, junto con otras empresas cordobesas estamos trabajando en un proyecto de internacionalización, con el acompañamiento de ProCórdoba, para exportar nuestros productos.
Frutos secos

AP Alimento Puro Concepto es una empresa creada por María Jesús Lisandron y por Sebastián Maud. Elaboran y procesan maní, frutos secos como las nueces, almendras, semillas de girasol, maíz, y ahora también pistachos.
“La oportunidad de producir se dio hace unos cuatro años, con la necesidad de realizar productos que no estuvieran en el mercado o estuvieran procesados de manera innovadora. Así surge lo de elaborar sin conservantes, sin aditivos, sin azúcar y sin gluten”, arranca María Jesús Lisandron, la fundadora del proyecto.
–¿Para qué sirven los productos en gastronomía?
–Se pueden implementar tranquilamente en la preparación de comidas, tenemos una mantequilla de maní salada que va muy bien en comidas y humus. Además de nuestro maní salado, que les aporta a las ensaladas un toque crunchy y proteico. Las tabletas proteicas se combinan muy bien con yogur griego y con los alfajores sin gluten y sin azúcar como un postre saludable. Todos los productos están orientados a un cuidado del cuerpo evitando alimentos ultraprocesados.
–¿Qué productos elaboran a partir del maní?
–En relación con el maní, elaboramos actualmente 10 variedades de mantequillas en las que se destacan una natural (un solo ingrediente) integral (un solo ingrediente) con dátiles (dos ingredientes) y un untable salado (que es genial para comidas, un aderezo natural sin químicos), snacks con sal rosa y páprika, con cúrcuma, con especias y un agridulce; sin colorantes, ni conservantes (no utilizamos ni sales, ni azucares refinadas), además en grajeados con chocolate negro y blanco sin azúcar. También hacemos tabletas proteicas endulzadas con miel y con whein protein. Además, tenemos otros productos mixeados y alfajores que contienen maní y hacen una alternativa rica y saludable, todo sin azúcar ni Tacc. Anexamos almendras con chocolate sin azúcar, almendras con coco y con miel, pasas de uva con chocolate y con arándanos. Nueces rellenas con dátiles bañadas en chocolate.
–¿En qué situación está AP y cuáles son sus proyectos a futuro?
–Estamos en fase de crecimiento, buscando distribuidores y comercios que incorporen la marca como amigos aliados. Tratando de trabajar la marca en la imagen, creando la web para que nos conozcan y podamos llegar a mayores lugares tanto en el mercado interno como en el externo.
Premezclas sin Tacc

Nutrizio nació como un proyecto familiar, de la mano de dos personas que comparten no sólo la vida, sino también la pasión por emprender. “Fusionamos nuestras profesiones –licenciada en Tecnología de los Alimentos y licenciado en Administración–, con el deseo de crear algo con propósito”.
“Detectamos una necesidad social: ofrecer alimentos verdaderamente inclusivos, nutritivos y libres de ultraprocesados. Observamos que muchas opciones sin gluten estaban cargadas de almidones, de conservantes y con bajo aporte nutricional. Entonces, decidimos ir más allá: desarrollar productos que no sólo fueran aptos, sino que también nutrieran de verdad, sumando valor con una propuesta saludable, simple y accesible”, describe Yamila Nanni.
–¿Cómo se dio la oportunidad de empezar a producir?
–Nos motivó agregar valor a la producción agrícola local, utilizando materias primas cordobesas como legumbres y cereales alternativos, con procesos responsables y conscientes. Nuestros productos son saludables porque están hechos con ingredientes reales, sin aditivos artificiales, sin conservantes, sin lácteos y sin ningún ingrediente alergénico. Contienen alto contenido de fibra, ayudan a regular la digestión, aportan proteína vegetal gracias al uso de legumbres y tienen un índice glucémico más bajo que los productos tradicionales sin gluten. Además, como están hechos con cereales alternativos e integrales, son más nutritivos que las mezclas convencionales basadas en almidones.
–¿En qué situación está Nutrizio y cuáles son sus proyectos a futuro?
–Hoy estamos en una etapa de consolidación y crecimiento, con presencia en ferias, en tiendas naturales y en algunos puntos de venta seleccionados. Seguimos desarrollando nuevas recetas, testeando fórmulas, fortaleciendo nuestra identidad y trabajando para que nuestros productos lleguen a más personas. A futuro, queremos ampliar la línea de productos, mejorar la distribución y seguir fortaleciendo la nutrición real y accesible como eje de nuestra propuesta. También apostamos al desarrollo local, al agregado de valor a materias primas cordobesas y al impacto positivo.