La Lotería de Córdoba y su concesionaria CET tienen salas de tragamonedas en 17 ciudades de esta provincia. Desde hace una década, buscan sumar otras localidades, pero sin éxito. Las discusiones sociales e institucionales que genera ese juego de azar hicieron que, aún donde los intendentes lo promovían, el desembarco fuese rechazado.
Tras el año y medio con las salas cerradas por pandemia, volvieron ahora los intentos por sumar salas en el interior cordobés (en la Capital la ley que autorizó ese juego no las admite).
El más firme por estos días tiene por propósito instalarlas en un hotel en Almafuerte, ubicado sobre la ruta 6 que la une con Río Tercero. Ambas ciudades cuentan con ordenanzas que prohíben las salas de slots.
Otro destino, por ahora citado más como versión, es Unquillo, en la región de Sierras Chicas muy próxima a la Capital.
En los años previos a la pandemia, localidades como Cruz del Eje, Manfredi, Hernando y Holmberg fueron las últimas que debatieron si permitían las máquinas slots. En todas, los gobiernos municipales se entusiasmaron con la idea por la recaudación que les representaría, pero el rechazo social fue tal que no se concretó en ningún caso.
El esquema se mantuvo en las 17 que ya había. Ocho de esas ciudades son turísticas: Carlos Paz, Alta Gracia, Río Ceballos, La Falda, Embalse, Cosquín, Mina Clavero y Miramar. Las otras nueve tienen otro perfil: San Francisco, Río Cuarto, Villa María, General Roca, Corral de Bustos, Morteros, Laboulaye, Cruz Alta y Deán Funes.
En total, habría algo más de cuatro mil máquinas en funcionamiento. Pero CET está autorizado a instalar hasta 5.400.
El intento en Almafuerte
En Almafuerte, los dueños de la franquicia del hotel Howard Johnson elevaron una nota al Concejo Deliberante solicitando la autorización para sumar una sala de tragamonedas.
En el seno del gobierno municipal se debate la cuestión, sin posiciones únicas, pero se anunció que se lanzaría una encuesta entre los vecinos que ayude a la evaluación. En la comunidad, hasta ahora, no parece aún un tema de la agenda cotidiana.
Sabiendo que la controversia no tardará en asomarse, desde el oficialismo radical apuntan que se autorizaría sólo si hay unanimidad con la oposición peronista.
Algunos exponen ya que la ordenanza de 2006 que las prohíbe apunta a la zona urbana. Y el hotel que las gestiona está en área rural, sobre la ruta, a mitad del trayecto hacia Río Tercero. Desde esta ciudad tampoco han asomado aún planteos, aunque resulta obvio que será –en caso de obtener luz verde–, la principal aportante de apostadores por tamaño de población cercana.
Desde el hotel han manifestado que sin sumar otra actividad sería insostenible mantenerlo en actividad. Y prometen crear 30 puestos de empleo locales si logran abrir la sala de juegos.
Cada municipio con slots recibe el 4,5% del total de lo recaudado. Lotería de Córdoba se queda con el 24% y la compañía privada CET con el resto, haciéndose cargo de premios, salas e impuestos.
La versión de Unquillo
Los empresarios del hotel de Almafuerte apuran allí la definición asegurando que si no se aprueba, la nueva sala se instalaría en Unquillo.
Pero Lotería y CET no tienen límites de salas. Por el contrario, vienen tratando desde hace años de sumar más ciudades que las autoricen.
En Unquillo, desde el gobierno municipal dijeron a este diario que no han recibido ninguna consulta ni propuesta para la instalación de tragamonedas. Hubo alguna versión de que habría habido búsquedas de locales eventuales para ese fin, pero en el municipio no la confirmaron. “Si existiera una propuesta, que no la hay, sería analizada”, respondió un funcionario municipal.
A apenas 10 minutos en auto de Unquillo se accede a las salas de slots instaladas en un hotel de Río Ceballos. Pero en el Gran Córdoba lo que tienta no es el público local, sino la torta grande de la vecina Capital.
Una larga controversia
Las tragamonedas generan controversias por varias aristas. El principal argumento de quienes se oponen es que la mayoría de los apostadores pertenece a los sectores sociales bajos y medios: se cuestiona que sea el modo en que se quita recursos con juegos de azar a los más pobres. La “ficha” es de bajo costo y las salas están abiertas 20 horas por día con ese fin, señalan.
Otro punto que se discute es si, en las ciudades donde funcionan, CET y Lotería no se llevan acaso muchos más recursos locales hacia afuera por las apuestas de sus vecinos que los que el reparto de lo recaudado genera para el municipio. De allí que, en cada ciudad, los centros comerciales aparezcan entre los principales opositores.
También se advierte sobre el riesgo de ludopatía (adicción al juego).
En tanto, los defensores insisten en que es un modo de generar un aporte extra de recaudación a las arcas municipales y que además es una opción que genera fuentes de empleo.
La concesión del Gobierno provincial a la compañía CET (Grupo Roggio más Miguel Carusso) se firmó en 2002 y se vencía en este 2022. Pero ya fue prorrogada hasta 2027.
En el marco de esas discusiones que llevan años, pronto Córdoba sumará otra arista del juego, ahora ya sin límites geográficos: una ley provincial autorizó las apuestas on line, de modo virtual, para diferentes tipos de juegos. Y esa licitación del Gobierno provincial para ponerlos en marcha está avanzada.
