Pintaba para un lunes “horrible” para Córdoba en materia de incendios, y efectivamente lo fue: las condiciones climáticas fueron las ideales para el inicio y propagación de fuegos, con muy fuertes vientos, calor y escasa humedad.
Decenas de focos se iniciaron en toda la geografía cordobesa. La mayoría fueron controlados apenas iniciados y otros se expandieron y generaron alarma. Al caer la noche, ninguno de los focos que preocupó durante el día parecía una amenaza para su continuidad durante el martes.
De todos modos, sin previsiones de lluvias para los próximos días, el riesgo sigue siendo extremo.
Fue tal sucesión de focos que las autoridades del Plan Provincial de Manejo del Fuego debieron ir eligiendo, según urgencias y distancias, a cuales destinar aviones y helicópteros hidrantes, porque no alcanzaban mientras se repetían los pedidos desde varios puntos del mapa cordobés.
A todo esto, otra complicación se agregaba: los fuertes vientos y la escasa visibilidad tampoco permitían el trabajo pleno de los medios aéreos.
Focos principales
Dos fueron los incendios que más alerta preocuparon en la jornada. El primero, una sucesión de focos en el valle de Paravachasca (cerca de Alta Gracia), donde el fuego muy cercano a áreas pobladas obligó a la autoevacuación de decenas de familias, en comunas como José de la Quintana y Valle de Anisacate. Al caer la tarde, la situación parecía más tranquila, con el fuego contenido.
En la cercana Alta Gracia, el cielo se volvió en un momento oscuro y hasta “llovieron” cenizas. Sobre el origen no hay certezas, pero algunas versiones apuntaban a una caída de cables de energía por el viento.
Otro punto crítico fue un foco rural muy cercano al área urbanizada de Almafuerte (departamento Tercero Arriba) donde las llamas fueron detenidas por los bomberos voluntarios a metros del predio de una importante planta envasadora de gas.
En esa misma zona, además, se debió evacuar a todos los huéspedes de un categorizado hotel que quedó tapado por el humo del mismo incendio, que incluso ingresó a una parte del predio, en la ruta entre Almafuerte y Río Tercero.
Aunque no hay certezas, se presume que el fuego se habría iniciado en el basural municipal. La autovía entre Almafuerte y Río Tercero debió ser cortada al tráfico durante varias horas por la casi nula visibilidad debido al humo existente, mientras bomberos de nueve cuarteles trabajaron en la zona.
El fuego afectó campos con rastrojos y varias áreas de monte residuales. Pero el mayor temor lo representó la cercanía con la planta de envasado y acopio de gas.
Alrededor de 100 personas debieron evacuarse, entre ellas las alojadas en el hotel Howard Johnson cercano al lago Piedras Moras. Bomberos de Almafuerte comentaron que no hubo viviendas dañadas ni personas heridas. Sólo el caso de una empleada de ese hotel afectada por un estado de nervios por la situación vivida.
Esta noche, ese foco permanece en guardia de cenizas para evitar reinicios, con algunos puntos aún calientes.
Más fuegos
Por la mañana, el primer foco a atender por los bomberos se inició cerca de La Cumbre, a la vera de la ruta 38, pero fue contenido horas después. Otro fue abordado en Paso de La Pampa, cercano a Villa Ciudad de América y el dique Los Molinos.
Con el paso de las horas y la persistencia del viento se sumaron otros frentes. Por caso, uno rural que avanzó sobre campos cultivables entre James Craik y Oliva, alrededor de la ruta nacional 9 sur.
También hubo incendios, pero sin mayor desarrollo, en San Clemente (Santa María), Villa Quillinzo (Calamuchita), Paso Viejo (Cruz del Eje) y El Arañado (San Justo), entre varios más. Al caer la tarde, la Federación de Bomberos apuntó un nuevo foco rural activo en Colonia San Bartolomé (departamento San Justo).
Pasadas las 19 de este lunes, la Secretaría de Gestión de Riesgo informó que todos los focos se encontraban “contenidos, con perímetros inestables pero sin actividad”.
