Un mozo salvó a una turista de morir atragantada con un trozo de papas fritas tras practicarle la maniobra de Heimlich.
El hecho sucedió en un restaurante de Villa Cura Brochero, en la provincia de Córdoba, cuando una mujer de 70 años, que estaba con un grupo de turistas, se atragantó con la comida y no podía respirar.
Sin perder tiempo, Emiliano Bustos fue en su ayuda y le salvó la vida. La secuencia quedó grabada en las cámaras de seguridad del lugar.
Quienes estaban presentes en el restaurante aplaudieron al héroe por su rápida y salvadora acción. Luego, la mujer, lo abrazó agradeciéndole a Emiliano por salvarle la vida.
“Todavía no caigo lo que está pasando. Se había viralizado todo. Fue una desgracia con suerte. Pude actuar rápidamente”, contó Bustos a El Doce.
Además, el mozo contó que constantemente se capacita con personal del Departamento Unidades de Alto Riesgo (Duar) tanto en el restaurante como en otros espacios.
Y relató el momento en que acudió a la ayuda de la mujer: “Mi hermano me hacía muchas señas, fui y veo que la señora se estaba desvaneciendo. Me puse detrás de ella, coloqué la pierna derecha adelante y la otra atrás, le hice cuatro compresiones y en ese momento largó la comida”.
A su vez, manifestó que su constante capacitación se debe a una experiencia trágica que le tocó pasar. “Una vez estaba jugando al futbol y un chico se desplomó y comenzó a convulsionar. Entonces, siempre escuché el mito de que se iba a tragar la lengua, llamé al Duar y me dijeron que nunca le haga esa maniobra. Y desde entonces me propuse capacitarme y actuar de la mejor forma”, relató Bustos.
Además, el mozo contó que la maniobra lo hizo de manera natural, “en ningún momento me tembló el pulso, ya lo había hecho antes. Viví situaciones similares a eso, en el restaurante y también practiqué las maniobras de Heimlich”.
Toda la secuencia quedó filmada por las cámaras de seguridad del lugar.
