Celeste Magalí González Guerrero, una de las primeras detenidas por el triple femicidio de Florencio Varela, es la persona que alquilaba la “casa del horror”.
Previo al crimen de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez, la imputada le subalquiló a “Pequeño J” el domicilio por el valor de mil dólares.
Este miércoles las declaraciones de González Guerrero fueron claves para avanzar en la causa. Ante el fiscal de Homicidios de La Matanza Carlos Adrián Arribas contó detalles de lo que sucedió entre la noche del 19 de septiembre y la madrugada de 20 en que mataron a las tres jóvenes.
La mujer de 28 años y mamá de un nene de 6 años se autoinculpó y dijo que no sólo marcó el descampado donde podían quemar la camioneta Chevrolet Tracker, sino que compró productos de limpieza para limpiar la escena del crimen.
Si bien al información brindada por la detenida debe ser corroborada, la mujer colocó a su pareja, Miguel Ángel Villanueva Silva de 25 años, como uno de los homicidas. Al momento de la detención, este hombre se negó a declarar.
Detalles sobre la banda narco que asesinó a las tres jóvenes
González Guerrero, a quien en el momento de la detención se le encontraron conversaciones y transacciones vinculadas a “Pequeño J”, detalló cómo funcionaba la banda narco que encargó los homicidios.
Posicionó a “Pequeño J” como un eslabón más bajo de lo que se pensaba y elevó el perfil criminal de Víctor Sotacuro Lázaro, quien se presentaba sólo como un remisero y lo ubicó en la Chevrolet Tracker y dijo que le dicen “Duro”.
González Guerrero marcó al prófugo “El Loco” David como otro de los homicidas. Dejó en claro que Matías Ozorio, capturado en Perú y expulsado a Argentina, era quien le proveía la droga para vender al estilo bolsero en Florencio Varela; y que se fue de la escena del hecho comiendo hamburguesas en un taxi.
Pero, sobre todo, sostuvo que el crimen fue trasmitido por una aplicación a una de las altas esferas de la banda que lo vio desde José C. Paz y habló del móvil del crimen.
El móvil del triple crimen: ajuste narco
Según las declaraciones de la testigo detenida, hay un motivo que involucra el robo de drogas y un personaje desconocido que pagó por el crimen.
“Le robaron 30 kilos de cocaína al “Duro” -Sotacuro-. Dos de las chicas fueron, sé que una era Brenda, pero la otra no sé quién fue. Aunque creo que la de 15 años no tenía nada que ver... Miguel -Villanueva Silva, su pareja- lo hizo gratis a eso, lo de matar a las chicas, porque no le dieron nada.
Matías -Ozorio- me contó que a Julio -Pequeño J- alguien, que no sé quién es, le pagó un millón de dólares por lo que hicieron“ relató la detenida.
Uno por uno, los presentes a al hora del crimen
- David Gustavo Morales Huamaní (“El Loco” David): De nacionalidad peruana y buscado por la Justicia, se sospecha que fue uno de los que mató a las chicas.
González Guerrero lo ubicó en su casa “con guantes”. Sotacuro lo mencionó como “el pasajero” que debía ir a buscar a la casa de Florencio Varela, quien se subió a su coche VW Fox con dos más embarrados.
- Matías Agustín Ozorio: imputado y preso en el penal de Sierra Chica tras ser extraditado de Perú, donde lo capturaron. Apodado “mulo” o “bebé” dentro de la organización narco, subordinado de “Pequeño J”.
Según el relato de González Guerrero, le comentó detalles sobre una videollamada en la que se transmitió el asesinato de una de las víctimas.
Fue quien le recomendó descargar la aplicación utilizada para las comunicaciones clandestinas. También quien le llevaba la droga que ella vendía. Es la persona que se fue de la escena del triple crimen comiendo una hamburguesa.
- Milagros Florencia Ibáñez: Imputada y sobrina de Sotacuro. Declaró en la causa y dijo que acompañó a su tío a hacer un viaje. Una imagen de una cámara de seguridad la toma a bordo del Volkswagen Fox que manejaba su amante, Alex o Diego, que está prófugo y es peruano.
- Manuel David Valverde Rodríguez: reconocido en fotografías por González Guerrero como uno de los hombres que estaba en su casa con guantes de látex. Descrito como flaco y alto.
- “Papa”: mencionado como jefe narco, controlaba grandes cantidades de droga (“el que baja toneladas”) y habría estado en José C. Paz durante la videollamada donde se transmitió el asesinato.
- “Lima” (posiblemente Abel): custodio o colaborador directo de “Papa”. Peruano, de 33 o 34 años. Conocido de González Guerrero a través de Facebook. Le habría relatado cómo asesinaron a una de las víctimas, ya que lo vio por videollamada.
- Jeremías Giménez: González Guerrero afirma que aportó un parlante y que cuando regresó a su casa el 21 de septiembre lo vio yéndose con tres palas que le había dado Miguel, su pareja. “Y ahí Miguel me cuenta que lo llamó para que se lleve el parlante que le había alquilado y lo ayude a acomodar la tierra que había quedado”, dijo la detenida.
La investigación sobre el triple crimen en Florencio Varela sigue en curso. Hay involucrados que se encuentran prófugos y son buscados por la justicia.
