Virginia Almada tiene 39 años, es de San Francisco (Córdoba), madre de tres hijos y está dando un paso que, hasta hace poco, parecía reservado solo para los varones: manejar camiones de gran porte. Su historia forma parte del programa nacional ConduACTORAS, una iniciativa impulsada por Holcim Argentina en alianza con la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) para capacitar a mujeres en conducción de camiones mixer y fomentar su inserción en la industria de la construcción.
Tras superar un proceso de selección que incluyó una instancia teórica con más de 100 participantes, Virginia fue una de las 23 mujeres finalistas que accedieron a la última etapa práctica del programa.
Las capacitaciones se realizan en la ciudad de Córdoba y alrededores, con prácticas en el autódromo Oscar Cabalén, donde las participantes reciben formación técnica intensiva para operar vehículos de transporte de carga pesada.
“Desde el momento en que me subí a un camión, supe que eso era lo que quería hacer”, contó Virginia.
Su vocación nació en el seno de una familia trabajadora: ayudaba a su padre en tareas técnicas y más tarde emprendió junto a su esposo en el rubro del transporte. Pero el acceso a la profesionalización no fue fácil. “No había capacitaciones gratuitas, y el costo de aprender a manejar camiones era altísimo. Además, muchas veces te miraban como si no fueras capaz”, recuerda.

Romper barreras desde el volante
ConduACTORAS surgió con el objetivo de derribar barreras estructurales y estereotipos de género en un sector históricamente masculinizado como el de la construcción. En su primera edición, el programa recibió más de 1.400 postulaciones de mujeres de todo el país, segpun indicaron desde Holcim.
La iniciativa incluye clases teóricas, formación práctica, acompañamiento técnico y la entrega de una certificación profesional para operar camiones mezcladores de hormigón.
“Este programa no solo nos da oportunidades laborales reales, también nos hace visibles. Nos pone en lugares donde nunca se esperó ver mujeres”, explicó Virginia, que además de completar esta capacitación, continúa estudiando albañilería y mantenimiento vehicular en espacios comunitarios, en alianza con organizaciones como Mujeres con Oficios.
Su compromiso con la formación también tiene impacto en su entorno. “Mis hijos no ven diferencia entre un trabajo de hombre o de mujer. Me ven manejar un camión como algo normal. Y en mi barrio, muchas mujeres se animan al verme, se acercan, me preguntan. Eso para mí es un motor”, dice con orgullo.
Equidad con perspectiva de futuro
Desde Holcim Argentina explicaron que ConduACTORAS forma parte de una estrategia más amplia para fomentar la diversidad e inclusión en el ámbito laboral. “Queremos construir una industria más equitativa, con oportunidades reales para todos los géneros”, señalaron desde la compañía.
La UNVM, por su parte, acompaña la formación académica y técnica del programa, fortaleciendo la vinculación con el territorio y el desarrollo de capacidades laborales con perspectiva de género.
En esta etapa final, las 23 participantes elegidas, de distintas provincias, llevan adelante prácticas en condiciones reales, aprendiendo no solo a conducir camiones mixer, sino también a operar bajo protocolos de seguridad y eficiencia logística.
Un cambio en movimiento
Historias como la de Virginia Almada reflejan el impacto transformador de este tipo de programas. De haber empezado a manejar con esfuerzo y sin acceso a formación, a estar hoy al volante de un camión en una capacitación profesional avalada por una universidad pública, su recorrido simboliza un cambio social que ya está en marcha.
“La igualdad de oportunidades empieza cuando alguien te da las herramientas para demostrar lo que podés hacer. A mí, este programa me abrió una puerta, pero también me mostró que podemos abrir muchas más”, concluye.
Para más información sobre el programa y futuras convocatorias: www.holcim.com.ar/conduactoras ó https://obra.unvm.edu.ar