Son muchos los lugares de Sierras Chicas que 12 meses después del trágico aluvión del 15 de febrero de 2015 están como entonces. En las últimas semanas, el giro de recursos desde la Nación hizo que se retomen varias de las obras que estaban casi paralizadas, pero ese envión aún no compensó los meses perdidos el año pasado: ninguna de las obras anunciadas en el plan de reconstrucción está terminada.
ESPECIAL. Sierras Chicas, a un año del aluvión
Ninguna de las 281 nuevas viviendas. Ni uno solo de los 10 puentes que deben ser reconstruidos, ni los vados y pasarelas que se llevó el río.
Las secuelas de la tormenta se siguen observando a cada paso. La red de calles de tierra no volvió a la normalidad en gran parte de la zona, como tampoco volvieron los paisajes ribereños que desaparecieron y dejaron desolación en torno a los arroyos. Las ocho vidas que se perdieron enlutan también a este sector de la provincia habitado por más de 225 mil personas.
Dado que muchas obras no están siquiera iniciadas, en los municipios de la zona estiman que recuperar la infraestructura perdida llevará al menos un año más.
Todas las localidades del corredor que va desde La Calera hasta Ascochinga están enfocadas recién ahora en la reconstrucción, tras el giro de los casi 441 millones de pesos que la Nación destinó a reparar los daños a comienzos de este mes.
Ese monto surge del relevamiento que se hizo en marzo del año pasado, pero que quedó totalmente desactualizado. Por eso, la Provincia ya adelantó a los municipios que las diferencias que surjan correrán por su cuenta.
Las empresas que encararon las primeras obras se cobraron una parte de los 100 millones de pesos que la Nación depositó el año pasado. Pero la deuda aún es alta.
Mientras tanto, los que se quedaron sin techo se distribuyen entre casas prestadas y de familiares y viviendas alquiladas con ayuda oficial.
En total, están en construcción –algunos a punto de quedar habilitados y otros en etapa de proyecto todavía– 10 puentes, nueve vados, nueve pasarelas, muros de protección en distintos tramos de arroyos y ríos y 281 viviendas, de las cuales algunas necesitan reparaciones y otras debieron levantarse desde cero, según informó el Gobierno provincial.
Uno por uno
Villa Allende
. Deben reconstruirse dos puentes, el de calle Balcarce y el de calle Pablo Cabrera. Fue una de las localidades con mayor destrucción de viviendas, 93 en total. De esas, 80 están en obra y para las otras 13 se entregaron módulos de materiales y subsidios para mano de obra.
Saldán.
Durante el último año, se avanzó en lo urgente pero poco y nada en reconstruir de manera definitiva las viviendas y obras afectadas.
Su actual intendente, Cayetano Canto, dijo que recién en diciembre último la ciudad logró firmar un convenio con la Provincia para recibir ayuda.
En Saldán fueron afectadas 15 viviendas, tres pasarelas y dos puentes, además de kilómetros de calles de tierra.
En tanto, están en etapa de relevamiento los dos puentes a los que se les dio una solución temporal, al igual que las pasarelas.
Mendiolaza.
En total, fueron afectadas 416 viviendas, de las cuales 20 tuvieron destrucción total y están ahora en etapa de construcción. Además, el temporal generó destrozos en el cuartel de Bomberos, la Comisaría, la oficina de Seguridad Ciudadana, un centro de salud, tres instituciones educativas y el polideportivo municipal.
El agua también dañó dos puentes (uno está en ejecución), cinco pasarelas y se llevó gran parte de la ruta intermunicipal, cuyo arreglo encaró la empresa Caminos de las Sierras.
Del relevamiento que se hizo en el lugar surgió la necesidad de hacer además dos nuevos canales de desagües, la canalización de una vertiente, un sumidero, la nivelación de las calles de dos barrios y dos lagunas de retardo, que ya están terminadas, entre otras obras.
“La única obra que se terminó ciento por ciento en el corredor de las Sierras Chicas fue la limpieza y encausamiento del arroyo que va desde La Quebrada hasta Saldán”, reconoció Daniel Salibi, intendente de Mendiolaza.
Río Ceballos.
Las viviendas afectadas fueron alrededor de 120. Además, tres puentes, cuatro vados y nueve pasarelas se perjudicaron con la tormenta.
La Municipalidad de Río Ceballos informó que un año después, se fisuró el puente Juan B. Justo. También se perdió el cordón cuneta, el alumbrado y las pircas en la avenida San Martín del 2500 al 3000.
“La mayoría de las casas fueron restauradas, salvo las que estaban sobre el río, mientras que 50 están en construcción”, dijeron. Hoy se trabaja en la reparación del puente Bregante y del cordón sobre San Martín.
Más daños
Unquillo. Fueron afectadas 56 viviendas, de las cuales 18 están en construcción y el resto espera concluirse antes de fin de año. "Algunas de estas familias están en casas de familiares y otras alquilando con ayuda de la Provincia", manifestó el intendente Jorge Fabrissin.
Además, está en proyecto de ejecución un puente en el "vado Estela". Se trabaja en la construcción de cuatro pasarelas. "Algunas de las obras ya están en ejecución, pero el grueso se encararán con parte de los 440 millones que giró la Nación", indicó Frabrisín.
Salsipuedes. Es necesario reconstruir dos vados y una pasarela, además de restituir el muro al costado del puente que se encuentra sobre la ruta E53. Hubo 28 viviendas fueron afectadas. Recibieron materiales y subsidios para mano de obra.
Agua de Oro y La Granja. En Agua de Oro se trabaja en la reconstrucción de tres vados y dos pasarelas. En La Granja, en un vado y una pasarela. Además, allí se tiene que construir un muro frente al cuartel de los Bomberos. Cinco casas fueron perjudicadas. Las familias ya recibieron materiales y dinero para mano de obra.
El Manzano. Se debe hacer un nuevo vado. A las tres casas afectadas ya se les dio la ayuda de materiales y mano de obra.
Cerro Azul. Se trabaja en la reconstrucción del puente sobre la costanera hacia Agua de Oro.
