Un violento temporal de viento y oleaje golpeó este lunes la costa de Caleta Olivia, en Santa Cruz, y dejó como saldo el hundimiento de tres embarcaciones artesanales de la histórica Flota Amarilla en el Puerto Caleta Paula. Las naves afectadas —el Yakisa, el Barracuda y el Alborada— cedieron ante ráfagas que superaron los 150 km/h y un oleaje que desbordó cualquier medida de contención.
La Unidad Ejecutora Portuaria de Santa Cruz (UNEPOSC) confirmó el daño estructural y atribuyó el siniestro a las condiciones meteorológicas extremas. No hubo personas heridas, ya que tanto tripulantes como personal portuario habían sido evacuados de manera preventiva ante la alerta por vientos fuertes.
Evacuaciones, rutas cortadas y clases suspendidas
El fenómeno no se limitó al puerto. La subsecretaria de Protección Civil, Sandra Gordillo, informó que la provincia activó un Centro de Operaciones de Emergencia (COE) luego de recibir una alerta naranja que alcanzó a gran parte de Santa Cruz.
Hubo interrupciones totales de rutas, suspensión de actividades escolares y laborales, y múltiples evacuaciones. “Cortamos todas las rutas de la provincia hasta las 22 del lunes”, señaló Gordillo. Aunque la situación mejoró parcialmente, la ruta 3 continuaba cerrada entre Río Gallegos y Eferroy.
En Río Gallegos se evacuaron 47 personas, en Caleta Olivia 150 y en Puerto Deseado 27. “Muchos prefirieron quedarse con familiares”, explicó la funcionaria. Las ráfagas superaron los 140 km/h en Caleta Olivia, 130 km/h en Pico Truncado y 127 km/h en Las Heras.
Daños materiales y operativos en marcha
El temporal provocó caídas de postes y cables, cortes de energía y afectaciones en barrios de Caleta Olivia y Comodoro Rivadavia. Las cuadrillas de la empresa Transpa trabajaban en distintas localidades para restablecer el suministro, mientras que Transener reportó una falla que fue solucionada durante la mañana.
El Servicio Meteorológico Nacional mantuvo durante toda la jornada el alerta violeta por vientos intensos para el centro y sur provincial. Las autoridades insistieron en no circular debido a la escasa visibilidad y al riesgo de vuelcos, especialmente en vehículos altos.
La situación en el puerto
El Puerto Caleta Paula quedó cerrado hasta nuevo aviso. UNEPOSC adelantó que se trabaja con buzos tácticos y empresas especializadas para evaluar si es posible reflotar las embarcaciones hundidas. La pérdida de estas tres unidades representa un golpe económico para las familias que dependen de la pesca artesanal.
La tormenta dejó en evidencia la vulnerabilidad de la infraestructura portuaria y obligó a reforzar protocolos ante eventos cada vez más frecuentes y severos en la Patagonia.




















