Aunque el aliento de las personas es generalmente más cálido que el aire, soplar una taza de té o café caliente enfría un poco ese líquido. Emma Davies, escritora científica y editora con un doctorado en química alimentaria de la Universidad de Leeds, Inglaterra, va más allá con una explicación científica.
¿Soplar una taza de té o café caliente realmente la enfría?
A medida que las moléculas de agua se evaporan de la superficie, la energía cinética promedio del líquido caliente en una taza cae, al igual que la temperatura. Las moléculas se condensan en una niebla humeante sobre la taza, lo que reduce la tasa de evaporación del líquido desde la superficie.
Concretamente: soplar reemplaza el aire caliente y húmedo con aire más frío y seco, lo que aumenta la evaporación.
Otra técnica para enviar el té o el café que también funciona
Según Davies, revolver el líquido caliente en una taza también ayuda a enfriarlo, ya que acelera el proceso de convección, que lleva el líquido más caliente del fondo de la taza a la parte superior.
La creación de un vórtice a través de la agitación también aumentará el área de la superficie para impulsar la evaporación y el enfriamiento.
