Los referentes de las clínicas privadas aseguran que se vienen “días negros”. La devaluación, el aumento del dólar y la escasez de algunos insumos están dificultando la actividad, al punto tal de dejarla al borde de lo insostenible.
El mismo diagnóstico es compartido por los representantes de entidades profesionales que ven reducidos sus honorarios ante la pérdida de la batalla que mantienen codo a codo contra la inflación, en especial, después de las elecciones primarias y de la última crítica devaluación del peso.
Las organizaciones piden la intervención urgente del Estado para paliar la situación.
“El panorama es complejo. Entendemos que las autoridades tomarán nota de este problema porque, sin ayuda, a muchas instituciones de salud no le quedarán más que tres meses de vida”, explicó Ignacio Escuti, secretario general de la Asociación de Clínicas Sanatorios y Hospitales Privados de Córdoba.
El representante de las clínicas privadas de Córdoba detalló el impacto que está teniendo la devaluación en el sector. “Esperamos subas de al menos el 100%. Muchos proveedores entregan mercadería sin precios. Esto quiere decir que dan los productos, no te cobran en el momento y después facturan cuando tienen el valor de reposición”.
Algunos insumos médicos siguen escaseando.
Consultado por la medida de aplicar copagos a los afiliados de obras sociales, Escuti informó que la mayoría de los casos se han resuelto. Los prestadores y los profesionales han mantenido reuniones con los financiadores (obras sociales y prepagas). En muchos casos, han llegado a acuerdos. Sin embargo, como el cobro de un monto extra por consulta se aplicó de manera anárquica, todavía hay instituciones que siguen con la medida. Aunque son las menos.
“Tenemos que ver cómo seguimos de ahora en adelante. Los honorarios han quedado desactualizados. Nos vamos a tener que volver a reunir”, anticipó.
El impacto de la suba del dólar
La devaluación de los últimos días sigue impactando en el sistema sanitario. Los medicamentos (sobre todo de alto costo), los insumos y aparatología siguen el ritmo del dólar. Algunos aplicaban los aumentos del blue, otros del oficial.
Carlos Navarro, presidente de la Federación de Bioquímicos de Córdoba (Febico), coincidió en el diagnóstico: “A partir de las nuevas medidas anunciadas por el ministro de Economía de la Nación, el ejercicio de la profesión bioquímica se empieza a tornar insostenible. Se van a tener que modificar algunas variables”.
Al requerir muchos insumos importados, las empresas proveedoras planteaban aumentos siguiendo el ritmo de los distintos tipos de dólar. “Hasta el día de la fecha no tenemos confirmados nuevos incrementos, pero esperamos subas superiores al 100% en aquellos productos que tienen las listas de precios dolarizadas”, detalló.
Navarro sostuvo que muchos proveedores entregan insumos sin precios definidos. Mientras que otros eliminaron los medios de financiación.
“Con estas nuevas condiciones, muchos profesionales no van a poder seguir trabajando”, advirtió, al tiempo que destacó el valor de los bioquímicos, sobre todo del interior. “Un buen diagnóstico en el lugar de residencia del paciente optimiza el tratamiento y hace más eficientes los recursos en salud”, agregó.
En la misma línea, Marcelo Farías, presidente de la Confederación de Asociaciones de Diálisis de la República Argentina (Cadra), sostuvo que es prácticamente imposible comprar insumos hoy y que los proveedores sólo entregan pagando al contado. El referente solicitó una reunión urgente con los financiadores y que se reduzcan los plazos de pago.
“Seguimos al borde del desfinanciamiento. Necesitamos la intervención del Estado. Sabemos que no será fácil porque las provincias tendrán menos coparticipación”, agregó Farías.
Repensar el sistema
La pérdida del poder adquisitivo de los profesionales es un tema que viene siguiendo de cerca el Consejo Médico de Córdoba. Hacia finales del año pasado, la entidad creó un observatorio de datos para poder llegar a un valor de los honorarios acorde con los indicadores de la macroeconomía.
Héctor Oviedo, presidente del Consejo, sostuvo que el sistema de seguridad social está virtualmente colapsado y que las obras sociales están cubriendo cada vez menos prestaciones a sus afiliados.
“Además de un aumento enorme de la inflación, en este último tiempo, la mayor parte del presupuesto en salud se está yendo a los medicamentos de alto costo y las tecnologías. Ha quedado rezagado el recurso humano, con salarios cada vez más bajos y una constante pérdida de su poder adquisitivo”, señaló.
“El médico gana cada vez menos y se gasta cada vez más en otras cosas. Hay que repensar el sistema de salud”, expresó.
Oviedo reiteró que, en épocas de digitalización, se torna inexplicable la demora en los pagos. Hay financiadores que tardan meses en depositar honorarios, después de realizadas las prácticas. Y coincidió en que es necesaria la intervención del Estado en la resolución del problema.
El próximo 20 de diciembre, en el Consejo de Médicos, se reunirán representantes de sindicatos, profesionales e instituciones para discutir el valor mínimo de los honorarios médicos.
