Eduardo Caeiro, el asesor letrado que representa a la mamá de IG, el bebé que murió el 23 de mayo en el Hospital Materno Neonatal de la ciudad de Córdoba, se sumó al pedido de exhumación de los cuerpos que hicieron las madres de los recién nacidos en marzo y abril y a los que ya había accedido el fiscal Raúl Garzón.
Según explicó Caeiro, la mujer tiene dudas sobre la identidad del cuerpo que le entregaron sin poder ver, luego de que ella fuera a bañarse y por la aparente descompensación, fue a terapia y luego murió. IG nació sano el 23 de mayo y con ocho horas de vida tuvo una bradicardia, hizo un paro cardíaco y no pudo ser reanimado. Según el relato de la madre, cuando salió de bañarse encontró a su hijo cianótico e hipotónico. Dio aviso a enfermería, que lo traslado a terapia, donde falleció.
La madre -que pidió a la fiscalía que se ordene a los medios de comunicación que no se la identifique- quiere que se haga un cotejo de ADN para saber si efectivamente el cadáver enterrado es el de su hijo, pero también busca, como las otras madres, descartar la posibilidad de sumar evidencias por la realización de una autopsia.
El martes pasado el fiscal Raúl Garzón aceptó el pedido de otras dos madres de recién nacidos que fallecieron en marzo y abril de este año y de quienes no hay autopsias.
Son Vanesa Cáceres, la mamá de Francisco, el bebé que murió el 18 de marzo; y Damaris Bustamante, quien dio a luz a Benjamín el 23 de abril a Benjamín y sin causa clínica evidente, falleció a las pocas horas. Las dos mujeres, representadas por el abogado Carlos Nayi, recordaron que en el momento de los fallecimientos desde el hospital las desalentaron a que pidan la autopsia.
Causa Hospital Neonatal de Córdoba
Vanesa recordó que le dijeron que los resultados iban a demorar más de una semana y que no se encontraría nada, y Damaris -quien también denunció la violencia obstétrica que padeció- relató algo parecido. A ninguna de las dos los médicos del Neonatal advirtieron que había dudas sobre la causa de los fallecimientos en el momento de consultarlas sobre si hacer o no la autopsia.
Los expertos forenses estiman que por el tiempo transcurrido es muy poco probable que se puedan detectar evidencias concluyentes en el análisis de los cuerpos. Por un lado, el nivel de potasio -que en los dos casos de junio se indica como el posible agente de la intoxicación mortal- ya no sería detectable y es poco probable que por la descomposición de los cuerpos se puedan encontrar signos de pinchazos o de lesiones dérmicas.
Sin embargo, con esta prueba Garzón buscará agotar la posibilidad de sumar evidencias con la intención de ampliar la imputación contra Agüero, a quien le atribuyó dos hechos, que son los que están “apalancados” en resultados forenses: las muertes, ambas el 6 de junio, de Angeline Rojas y Melody Molina.
La exhumación de los cuerpos de IG, Francisco y Benjamín se haría en las próximas horas.
El fiscal adelantó que tomará cerca de 10 días más para decidir la situación procesal de la enfermera Brenda Agüero, detenida con el cargo de “homicidio calificado por procedimiento insidioso”, por dos casos.
Pero a la par de esta definición, Garzón parece apuntar a una ampliación de la imputación, con la atribución de responsabilidad material de las otras tres muertes de la saga y los ocho casos que serían definidos penalmente como tentativas de homicidio calificado.
Hay otra prueba clave para el fiscal: un estudio médico sobre la mecánica de las muertes de Francisco, Benjamín e IG. Con este informe, el análisis de las historias clínicas y los testimonios que ya tiene en la causa, se definiría la situación de Agüero.
Causa Neonatal: responsabilidades funcionales
El fiscal Garzón dispuso el levantamiento del secreto de sumario tras la presentación en la fiscalía de Garzón Pablo Carvajal, el exsecretario de Salud provincial, que es el último de los funcionarios imputados por “omisión de deberes”.
Carvajal, quien negó los hechos y se abstuvo a declarar, permitió que se termine secreto de sumario para que las partes puedan acceder en forma completa al expediente, que se tramitó todo en papel. Ahora se abre un periodo de recepción de pedidos de nulidades y los imputados pueden, si lo desean, ampliar su declaración indagatoria. Brenda Agüero declaró en forma amplia y entre los imputados por responsabilidades funcionales, sólo lo hizo de ese modo el ex vicedirector de Gestión Hospitalaria del Neonatal, Alejandro Escudero Salama.
Hay expectativas de que en los próximos días den explicaciones más detalladas la exdirectora del Neonatal, Liliana Asís; y el exministro de Salud provincial, Diego Cardozo, quienes no declararon en forma amplia ni respondieron preguntas contra su voluntad, en un primer momento, por consejo de sus abogados.
